Fábricas textiles cerradas en Béjar para reconvertirlas en espacios de arte

Las antiguas instalaciones de la fábrica Cobhiltex, en Béjar, acogen hasta este domingo, 7 de septiembre, una exposición promovida por el joven Antonio Hoya dentro de su proyecto participativo “Acciones sobre Béjar” coincidiendo con la duración de la novena a la Virgen del Castañar, que se celebra en el santuario.

Se trata de la última actividad de una iniciativa que comenzó en diciembre gracias a las actividades participativas “Béjar al brasero”, que siguió en enero con “Béjar exquisito” y finalizó en marzo con “Béjar ausente”. Cuenta con el apoyo del Ayuntamiento de la ciudad, de la Cámara de Comercio y el Casino Obrero y dos empresas colaboradoras más en una iniciativa con buena afluencia de público.

La muestra ofrece un recorrido de imágenes sobre el proyecto en la fabrica Cobhiltex, que cerró entre los años 1985 y 1986 en la que un grupo de obreros se unió como cooperativa para seguir peleando, explica Antonio Hoya. “Ese espíritu es el que quiero transmitir a los bejaranos porque este tipo de espacios solamente necesitan barren y con tres o cuatro arreglos están listos para este tipo de actividades sin grandes inversiones ni un gran despliegue para convertirlo en un espacio vivo”, comenta Antonio Hoya.

En cuanto a las conclusiones de su estudio, el joven estudiante afirma que no existe una respuesta única para Béjar sino apuestas por dar un nuevo uso a fábricas industriales para que artistas de todo el mundo se acerque para estancias de dos o tres meses e, incluso, se queden a residir. En este sentido, asegura que: “Béjar tiene futuro y hacen falta este tipo de eventos para mirar y abrazar el pasado con nostalgia, pero sobre todo para cambiar ese ánimo y mirar al futuro”, detalla.

Con respecto a la iniciativa de jóvenes para impulsar la ciudad, Antonio Hoya destaca como positivo lanzar un mensaje a la clase política para que tome conciencia de que la cesión de ese tipo de espacios, con un poco de colaboración, es positiva para la ciudad. “Hace falta poco, tan sólo sentarnos, hablar unos con otros y ver que no estamos tan alejados” comenta para concluir que: “no soy al único que le importa Béjar y ese es el entendimiento al que tenemos que llegar entre todos porque nos importa la ciudad y entre todos podemos unirnos para que esto funcione”.

La exposición cerrará este domingo, día 7 de septiembre con un amplio horario de visita de 12:00 a 14:00 horas y de 17:00 a 19:00 horas en esa antigua fábrica ubicada en la carretera de Salamanca, pero con acceso por el número 9 junto a la subida al paraje de Monte Mario en un lateral de ese antiguo edificio fabril.

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