Convivencia intercultural en Béjar con el mejor sabor de la tradición

Béjar acogió ayer por primera vez una cita intercultural con el objetivo de fomentar la convivencia entre extranjeros residentes en la ciudad y compartir la riqueza de sus propias gastronomías.

El evento tuvo lugar en el centro de ocio de la ciudad, antiguo mercado de abastos, con presencia de un grupo de personas procedentes de países como Suecia, China, Brasil, Argentina, Italia, Paraguay y Perú, entre otros. La iniciativa partió de la asociación sociocultural del barrio de San Juan con el objetivo de fomentar la convivencia entre las personas extranjeras que, en su día, decidieron dejar atrás su país e iniciar una nueva con Béjar como destino.

Así lo explicaron ayer Raquel Calvo y María Rodríguez como representantes de esa entidad. “Vimos la necesidad de relacionarnos con personas migrantes que hay en Béjar. Nos estamos conociendo y se están animando a participar en actividades del barrio como el huerto urbano y los talleres de ganchillo”, afirmó Raquel Calvo.

Béjar cuenta con una gran comunidad latina procedentes de distintos países, que alcanza ya los 1.200 integrantes en una cifra que supone el 10 por ciento de la población empadronada en la ciudad. Natural de Paraguay, comunidad con unos 300 miembros, Cristina Armoa es una de las promotoras de las actividades vinculadas a los latinos que se realizan en Béjar y destacó ayer que iniciativas como esa merienda intercultural sirven para conocernos, convivir y unirnos a los españoles también para que conozcan nuestra cultura y nuestra gastronomía.

Un ejemplo de ello es Iván Morí, natural de Perú, que llegó a España en noviembre. “Queríamos vivir en un lugar más tranquilo para que mis hijas puedan crecer con seguridad y tranquilidad”, afirmó para añadir que llegó con su familia a Madrid, pero le recomendaron desplazarse a Béjar. “Nos dijeron que la ciudad era un lugar tranquilo para los chicas, vinimos y nos gustó. Estamos muy contentos, aunque echamos de menos la comida de Perú”, concluyó con el propósito de unir a los 30 peruanos residentes en Béjar en una asociación o entidad.

El caso de Stefan Holmqvist es distinto ya que conoció a su novia, Tania, en su primer año en Barcelona. Es bejarana y hace dos años decidieron instalarse en la ciudad natal de ella para iniciar una nueva vida gracias al teletrabajo. “Es un lugar muy bonito porque está muy cerca de la naturaleza”, explicó.

Otros ejemplos de migrantes en Béjar son la china Yimin Fei y Milton Bernardes, de Brasil, que pasa la mitad del año allí y la mitad en España. Milton pasa seis meses en Brasil y seis en Béjar coincidiendo con las épocas de buen tiempo en ambos países. Para él, vivir en Béjar es una experiencia que disfruta porque "las personas son muy amables y me siento como si estuviera en Brasil". Con respecto a la merienda intercultural, destacó ayer que: "es más que una merienda, son representaciones de otros países. Hablamos de la comida como representaciones culturales para estar aquí juntos", concluyó. Por su parte, Yimin Fei detalló que eligió Béjar porque su hija vive en Béjar. Lleva cuatro o cinco años en la ciudad, pero tiene que viajar a su país para trabajar.

Todos ellos se unieron ayer para romper fronteras y convivir en paz, aunque sea lejos de sus países.

• Temas
• Béjar y Sierra
• Suecia
• Perú
• Argentina
• Italia
• Béjar
• China
• Brasil
• Actividades