El pueblo de Salamanca que celebra el primer nacimiento en 52 años

Un nacimiento histórico. Así se puede catalogar la llegada al mundo de Miguel Ángel, un bebé recién nacido de 4,2 kilos de peso y que será el primer neonato inscrito en el registro de nacimientos de la localidad de Las Casas del Conde desde 1973, es decir, hace 52 años. Un hito a que añadir que será el primero desde la instauración de la democracia en España y que llena de alegría a un municipio azotado por la España Vaciada.

«Ha sido un parto largo y está ahora en observación en neonatología, pero está todo bien y se están realizando pruebas rutinarias», comenta Juan José Acera, padre del recién nacido y alcalde este municipio que es el más pequeño en cuanto a extensión de toda Castilla y León. «Estamos muy contentos y felices, obviamente», señala Juan José, «el niño ha nacido en el hospital de Salamanca, pero desde hace 15 años la ley permite registrar el nacimiento en el lugar donde va a residir y pasará a ingresar la lista de nacidos de nuestro pueblo», comenta con satisfacción.

Tanto Juan José como su pareja Patricia, que comparte con él su labor en el Consistorio local, se sienten muy halagados por los constantes mensajes y llamadas que están recibiendo desde la madrugada del domingo cuando nació Miguel Ángel. «Pero ya lo habíamos notado desde antes, siempre nos preguntaban que cuánto quedaba y es que somos como una gran familia», explica el padre y regidor municipal. Las casualidades del destino han propiciado que este bebé haya llegado con un hornazo bajo el brazo, por el Lunes de Aguas, y un apagón histórico. «Hemos estados tranquilos porque aquí pusieron en marcha los generadores y todo funcionaba con normalidad», apunta.

Juan José y Patricia son además, un ejemplo de aquellos que apuestan por volver a sus raíces, ya que sus familias son de la comarca de la Sierra de Francia, y han establecido su vida en sus orígenes. «Estamos encantados de estar dónde queremos vivir, he trabajado en Madrid o Barcelona, pero mi sitio es aquí, en mi pueblo, con los míos», reivindica Juan José Acera. Durante estos días, divide sus horas entre sus obligaciones de alcalde y de padre, entre Las Casas del Conde y Salamanca, pero con la ilusión de una nueva vida que ya forma parte de la población de este municipio serrano que espera con ilusión conocer a Miguel Ángel.

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