Broche de oro para 'Arcos y Ecos' en Peñarandilla

Ayer cerró con broche de oro, en la iglesia de La Asunción de Peñarandilla, el ciclo de recitales poético musicales teatralizados de 'Arcos y Ecos' que, con su acostumbrada excelencia, deleitó al público presente que abarrotó los bancos para disfrutar del espectáculo que ha dejado una estela de éxitos, a su paso por las 28 iglesias mudéjares que tuvieron la suerte de acoger al arte en sus templos de paz.

Grandes y chicos quedaron con la huella de este montaje, que no dejó indiferente a ninguno de los que tuvieron la oportunidad de presenciarlo, pues desde los que recitaron desde los bancos cada poema, hasta los que con una sonrisa reconocieron la música, y con la indiscutible reflexión a los que todos en algún momento fueron llevados, la satisfacción fue la recompensa que coronó el cierre del ciclo. Satisfacción que desde el Área de Cultura de la Diputación de Salamanca, hasta las diócesis con su indiscutible apoyo, a los párrocos de cada iglesia, a los alcaldes y alcaldesas de cada pueblo, a los habitantes que se volcaron a ser cómplices de los artistas y no solo durante las funciones, sino que la mano solidaria fue patente en montaje y desmontaje de escenografía, en refrigerios, en esa humanidad que nos hermana desde amor al prójimo y que hizo brotar la belleza, que tocó la fibra de cada involucrado y que sin duda quedará en el recuerdo.

Como milagro llegó el Arte a la Salamanca rural, y desde la gratitud fue recibido, para multiplicarlo y dejar atrás la idea de que solo en las grandes ciudades se puede disfrutar del teatro, la música... y esa fue la semilla de amor que impulsó este proyecto, y cumplió con creces su objetivo. Los artistas en escena: Juan Francisco Vicente, Jenny Leyva y Guadalupe Lancho, junto con el productor y coordinador, Javier de Prado, están convencidos de ello.

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