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DE CAMPO

Hay que hacer algo más

Susana Magdaleno

Salamanca

Martes, 23 de mayo 2023, 07:46

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Hace más de 20 años que los ganaderos viven con el mismo problema que ahora con la tuberculosis y que piden lo mismo: que no haya que sacrificar tantas vacas porque la enfermedad no se va y les arruina. Unos lo han dejado desde entonces y otros aguantan, y algunos no saben ni cómo. Más de 20 años después los ganaderos piden lo mismo: que les reciban los políticos. Y entre ahora y antes ha habido cientos de reuniones de este tipo entre ganaderos y administración con el mismo resultado: ninguno o muy poco. Y se han ido unos consejeros y han llegado otros, y ha cambiado la Junta y el Gobierno... y todo sigue igual.

Si los ganaderos quieren que se les informe y que el discurso sea el mismo en todas las unidades y hablar de si los equipos de saneamiento son o no profesionales o de qué pasa con el plan de la zona de especial incidencia, su solución está en el consejero Gerardo Dueñas.

Si quieren controlar más la fauna, tienen que insistirle al consejero Juan Carlos Suárez-Quiñones. Si es cuestión de dinero, es cosa de la Consejería, que tiene su presupuesto, o ya del presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco.

Pero si conseguir todo lo anterior no serían más que parches porque, según dicen los propios ganaderos, el objetivo es que la tuberculosis se controle y no se erradique, la responsabilidad sin duda es del Gobierno de España. Lo es del ministro Luis Planas y lo es porque él es ahora el responsable del programa nacional de tuberculosis bovina y el responsable de la coordinación entre comunidades autónomas y quien obliga a cumplir el plan. Y lo es también de la ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, que es la que tiene a las comunidades con las manos atadas cuando se trata de controlar a la fauna.

Hace más de 20 años que el problema que tienen los ganaderos es el mismo y han pasado varios ministros pero la diferencia es que antes el ganadero se encontraba con la respuesta de que la fauna no es reservorio de la tuberculosis y ahora, en cambio, estudios científicos han demostrado que sí. La otra diferencia es que ahora hay una vacuna que está un poco más cerca.

De toda esta revuelta de ganaderos que amenaza con ir a más, lo que resulta sorprendente es que el ganadero hasta ayer casi no se haya dirigido directamente al Ministerio y que la Junta, en lugar de exigirle al Gobierno que actúe como lo que es, responsable del programa nacional de tuberculosis y que convoque, por ejemplo, una reunión de expertos, sector, comunidades... para analizar el plan sobre la enfermedad y la posibilidad de cambios, haya permanecido callada como si la responsabilidad fuera suya, cuando lo es pero en los «parches». Está tardando en exigirle al Gobierno que asuma su papel, como se lo exige con el lobo aunque no le haga ni caso. Y el beneficiado de que no lo haga es Planas, que está cómodo, y al que parece que lo que pasa en Salamanca ni le va ni le viene.

Hace más de 20 años que todo sigue igual y puede seguir así si se pierden en reuniones menores. Hace más de 20 años pero nunca antes se les había visto tan mal.

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