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Hagamos una lista. Lo de Begoña, lo de Aldama, lo de Koldo y lo de Ábalos; lo del fiscal general, lo de Lobato y lo de Óscar López; lo de la DANA, lo de Teresa Ribera y lo de Margarita Torres. Tiene tantos frentes abiertos Pedro Sánchez que el último de sus problemas es 'lo de Tudanca', es decir, lo del PSOE de Castilla y León.
Tanta celeridad se gasta la política de estos tiempos que lo que hace menos de mes y medio era una 'cruenta batalla' entre Ferraz y el PSOE de Castilla y León, con Tudanca camino de la guillotina, ahora ha devenido es un asunto menor al que ya le meterán el diente después de la Navidad, eso, sí todos los protagonistas de esta historia se comen el turrón.
A las puertas del Congreso Federal del PSOE en Sevilla de este fin de semana la debilidad del otrora líder supremo, Mr Wonderful Sánchez, puede ser el mejor aliado para que Tudanca pueda sumar más años como el secretario socialista de Castilla y León más longevo. El calendario, que otras veces le ha traicionado, sopla ahora con el viento a favor del burgalés, que podría aguantar en el sillón hasta la próxima contienda electoral.
Para empezar, tal y como está el patio de Ferraz, a ver quién es el guapo, o la guapa, que da el paso para encabezar la candidatura oficialista en unas potenciales primarias. Se antoja un ejercicio extremadamente complicado, por no decir suicida, casi kamikaze. En la lista de posibles nombres, empezando por la ministra Ana Redondo, y finalizando por el delegado del Gobierno, Nicanor Sen, no parece que nadie quiera sacrificar su posición actual para lanzarse a una aventura de escasa rentabilidad y tan alta probabilidad de fracaso.
Los pretorianos de Tudanca llevan trabajándose a cada uno de los militantes del PSOE de las nueve provincias desde hace meses, martilleando voto a voto, y desde hace ya tiempo están convencidos de que tienen apoyo de sobra por si hay que atravesar el Rubicón de las urnas. Sólo una imposición de Ferraz, manu militari, podría desviar el actual guión, pero ¿quién puede ejercer esa disciplina? ¿Santos Cerdán, el del sobre de los 15.000 euros señalado por Aldama? ¿O el mismo Sánchez, en su momento más bajo de los últimos años? Nadie le puede negar al actual secretario Federal del PSOE su capacidad para llevar a la práctica el Manual de Resistencia, pero no parece que su tiempo y sus recursos se vayan a malgastar en las cuitas internas con los socialistas de Castilla y León. Tudanca pasará casi inadvertido en el cónclave de Sevilla y eso es lo mejor que le puede pasar para su futuro. A río revuelto...
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