Ocho 'amigos' de Montero
Ya son ocho los agresores sexuales y violadores que han salido de la cárcel en Salamanca gracias a la Ley del 'solo sí es sí' ·
Salamanca es una ciudad bastante segura, pero lo es menos desde que la señora del marqués de Galapagar parió la nefasta Ley del 'Solo sí es sí' en agosto del año pasado y con el apoyo de lo mejorcito del Congreso: PSOE, Podemos, Esquerra, Cs, PNV, Bildu, Más País, Compromís y Junts. Gracias al engendro de Irene Montero, ocho agresores sexuales han visto reducida la condena que en justicia les correspondía por atentar contra la libertad de las mujeres. En Castilla y León las reducciones de pena se elevan a 48 y hay siete violadores y abusadores en la calle gracias a la torpeza o la mala uva de la marquesa consorte. En España ya sobrepasa los 1.100 el número de los repugnantes delincuentes agradecidos a Montero y la cifra seguirá creciendo porque, al contrario de lo que anunciaban el Gobierno sanchista y la ministra consorte, el Supremo no solo no ha desautorizado a los jueces que rebajaban condenas por la chapucera Ley, sino que ha acabado por ratificar el desastre.
En cualquier país medianamente civilizado la señora de Pablo Iglesias habría dimitido o habría sido destituida de manera fulminante por el presidente del Ejecutivo. Pero hace tiempo, cinco años exactamente, que España dejó de ser un país medianamente civilizado para convertirse en un remedo de república bananera, donde pagamos el salario de ya no se sabe cuántos ministros y ministras, a cada cual más inútil o más dañino.
El 'Solo sí es sí' debería haberse convertido en la tumba política de la señora Montero, pero Sánchez ha decidido mantenerla porque prefiere la permanencia a la decencia. Tampoco está el presidente en disposición de dar ejemplo de nada. Ahí le tenemos aguantando el tipo con su habitual rostro pétreo tras un nuevo asalto al poder judicial, esta vez en forma de nombramiento digital de Dolores Delgado como fiscal de la Memoria Democrática, saltándose todos los consensos y cayendo en todos los nepotismos posibles.
Ahora el marido le anda buscando a Montero un puesto de salida en las listas de Sumar, lo más cerca posible de Yolanda Díaz, porque tampoco van a ser muchos los candidatos del conglomerado comunista-separatista que salgan de las elecciones con sueldo para cuatro años, que es de lo que va esto de las negociaciones del viejo Podemos con la chupiguay gallega.
De momento Díaz ha conseguido vampirizar bajo su manto a lo más radical de cada territorio, las mismas siglas que fueron vapuleadas en las elecciones municipales y autonómicas. Al final ha conseguido poner de rodillas al matrimonio del casoplón, los que su día fueron sus padrinos y mentores y se han convertido en su última y exquisita víctima. A Iglesias lo desterró Isabel Díaz Ayuso y la otra Díaz le da ahora la puntilla.
En las próximas semanas veremos cómo Tezanos, el cocinero demoscópico de Sánchez, coloca a Sumar y sus excrecencias en lo más alto de los sondeos, seguramente como tercera fuerza por encima de Vox. Y ese enaltecimiento será tan solo la confirmación de la ruina electoral que ya se produjo el 28-M en toda España y con más claridad aquí en Salamanca, donde la extrema izquierda fue barrida del mapa municipal.
En el Consistorio de la capital salmantina hemos sufrido las ocurrencias de las dos concejalas representantes del populismo revolucionario, cuya aportación ha sido nula, si acaso una enorme pérdida de tiempo para el resto de ediles.
El comunismo marxista y ultraecologista, tanto en su versión 'monísima' como en la rama bolivariana, ya no cala entre los votantes españoles, y el 23 de julio tendremos la confirmación de que no sirven ni como bastón de apoyo del sanchismo decadente.