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Opinión

33 años

España se ha caído de las portadas de prensa, pues hoy es un país irrelevante, amigo de los peores y enfrentado a la libertad

Sábado, 19 de octubre 2024, 05:30

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He crecido con la mejor España, soy un «baby boomer» feliz. He tenido esa suerte, como tantos españoles, aunque muchos, demasiados, no lo sepan y vivan en el mundo feliz del mesianismo, acudiendo regularmente a votar en esas fiestas de la democracia que, para ellos, ellas, elles y Almodóvar, son todo un aquelarre en torno al reverendo Jones que toque. Ahora toca el reverendo Sánchez, Jones Sánchez.

Nací, crecí y me formé en una España, para no andar con florituras, con dos cojones y un destino: la libertad, la democracia, el bienestar y una creatividad profesional y artística desbordantes.

Aquella España era deslumbrante. Como «baby boomer» aún tenía conexión generacional con el infierno que fue el mundo, con nuestra Guerra Civil, con la II Guerra Mundial, pero ya el sol salía para todos y hasta las campañas turísticas de promoción así lo indicaban: «España, todo bajo el sol». Me sentía Hernán Cortés con un niqui de «Lacoste». Recuerdo como si fuera hoy una mañana californiana de 1991 en la terraza del «Brown Pelican», en Arroyo Burro Beach, leyendo en la portada de «Los Angeles Times» la noticia sobre la apertura en el Palacio Real de Madrid de la Conferencia para impulsar el proceso de paz en Oriente Medio. Allí estaban Gorbachov y Georges Bush, patrocinadores, con Felipe González de anfitrión. En Madrid, ¡qué orgullo!, ¡qué honor!, España en el mapa del mundo con luz y voz propias, al fin se acababa la travesía del desierto iniciada en 1898 y seguida con repúblicas imposibles y dictaduras. Como rezaba la publicidad de la época del Banco Hispano Americano, «lo hispano marcha», y vaya si marchaba.

Hoy, 33 años después de aquel octubre frente al océano Pacífico, el café «Brown Pelican» se ha convertido en el «Boathouse», Arroyo Burro es conocida como Hendry´s Beach, el Hispano se acabó diluyendo en el Banco de Santander, Oriente Medio está otra vez en guerra, y España ha vuelto a las tinieblas y al odio. Sólo quedan en pie los niquis de «Lacoste», que sigo usando con bastante dignidad… España se ha caído de las mejores portadas de prensa, pues hoy es un país irrelevante, amigo de los peores y enfrentado a la libertad, a la democracia y hasta a la Justicia, con Pedro Sánchez en la peor versión de Harry El Sucio. La España de hoy es un socio poco fiable, donde hasta se llega a pedir desde su Gobierno el exterminio de Israel, lo cual es gravísimo, aunque lo dijera una analfabeta funcional de Ferrol como Yolanda Díaz. Haciendo amigos.

Epílogo: No puedo creer que en sólo 33 años nos hayamos cargado a nuestra maravillosa nación, ¿o si?

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