La DANA...

Casi medio mes ha pasado tras aquel terrible 29 de octubre en el que los cielos descargaron toda su furia en tierras valencianas y en las castellanomanchegas con el resultado que todos conocemos a estas alturas.

Ahora mismo se sigue recogiendo barro, se siguen apartando vehículos y se intenta alcanzar una normalidad imposible cuando vemos que se ha perdido todo, absolutamente todo, incluso la vida en tantos tristes casos. Y ahora comenzamos a reconocer que quizá este capítulo no se gestionó de la mejor forma posible. Ayer el señor Mazón así lo señalaba anunciando cambios en su equipo de gobierno. No será suficiente para tantos valencianos que siguen pensando que los avisos llegaron tarde tenga quien tenga la culpa. Pienso que aún no ha llegado el tiempo de las dimisiones, que ahora deben responder con firmeza y aportar soluciones a quienes están esperando no solo las ayudas, también la mano amiga que llegue tendida a cada rincón de esa tierra completamente arrasada. La acción política ha sido ciertamente dolorosa, no se puede decir que si necesitas algo no tienes más que pedirlo porque es evidente que se necesita la mano tendida del gobierno central que también ha debido asumir su responsabilidad directa frente al gobierno de una comunidad que se mostraba desde el primer momento como inoperante. Digan lo que digan esta catástrofe es fruto del cambio climático que aún ahora cuenta con muchos negacionistas. Estas riadas se van a seguir produciendo mientras la temperatura del mediterráneo siga subiendo provocando la tormenta perfecta en unas tierras que cuentan con cauces hídricos muy cortos en los que los aluviones que se pueden provocar son terriblemente nefastos. Ojo, esta información no es de ahora, la historia de precipitaciones en tierras mediterráneas viene ya de largo y es conocida, lo que no se entiende es que se permita la construcción en tierras previsiblemente inundables.

De estos polvos vienen estos lodos y así seguimos escribiendo una historia con sangre y fuego. Ahora solo se puede dar una respuesta y ésta es la de la ayuda y la de la solidaridad. Desde estas palabras quiero rendir mi homenaje a todos los jóvenes, esa generación de cristal que ha demostrado ser de acero dando una gran lección a políticos apocados que les ha quedado grande desde el primer momento. Ahora me pregunto ¿es realmente importante la hora y el minuto del aviso de DANA? La respuesta es sí porque se ha jugado con muchas vidas humanas, pero inmediatamente después sería importante asumir la culpa que bien puede ser humana y acto seguido, mejor hubiera sido poner en marcha las ayudas, la protección y la solidaridad con las víctimas. Quedan meses para volver a la normalidad en la querida tierra valenciana, ahora lo importante es que esa solidaridad se mantenga en el tiempo.