Tertulia popular

Lunes de Aguas. Una de esas curiosidades de los pueblos, que muchas veces mantienen tradiciones extemporáneas y luego se olvidan de otras que les ligan del todo con sus raíces. El Lunes de Aguas es una fiesta-nofiesta -se mantiene como día festivo en algunas localidades de la provincia- única en España y de enorme arraigo popular. Una excusa formidable para encontrarse con familiares y amigos. También es el día de mayor promoción y consumo del hornazo, que despierta tantas simpatías como recelos entre los propios del lugar. Tan de culto es el día, que muchas empresas permiten salir con antelación o no trabajar por la tarde, con el fin de cumplir con la costumbre de acudir a los parques y a los márgenes del río Tormes a celebrar la tertulia popular más multitudinaria del año en Salamanca, en esta ocasión cargada de asuntos para debatir. Unos de ellos serán más de moda, esto es, más propios del entretenimiento, como el supuesto contrato millonario de David Broncano que trae locos a los sindicatos en RTVE, envuelta en sus revueltas de cambios de presidenta en la Corporación, tras el cese de la expresentadora Elena Sánchez y el nombramiento de una profesional de reconocido prestigio intelectual, Concepción Cascajosa, pero que el PP considera un nombramiento político en toda regla. Quién sabe ya cómo catalogar lo que ocurre en la radio y televisión públicas. Broncano sigue su relación con la actriz salmantina Silvia Alonso hecha pública hace un año, haciendo alarde de sexo, como no podía ser de otra manera en el irreverente espacio La Resistencia, hecho este que, en el siglo XVI, Felipe II hubiera sacado a la otra orilla del río en compañía del Padre Lucas, o «Padre Putas», según guste decir a cada cual. Lo que resulta curioso es que el afamado presentador, al que hace unos días se situaba con pie en pirulí y que ahora tendrá que esperar a la lucha interna en el ente, no haya contado las cifras de ese eventual acuerdo, cuando tanto le gusta saber de los emolumentos o ahorros de famosos, artistas y deportistas que pasan por su exitoso programa.

Sin duda alguna, otro de los protagonistas será el ministro Óscar Puente, que pasó de perdedor de la alcaldía de Valladolid a portavoz improvisado del jefe Sánchez, en la presentación en el Congreso del señor Feijóo, con una performance que se ve que dejó tan impresionado y contento al que sería elegido presidente meses después que le premió con una cartera ministerial de total impacto para Salamanca y para el resto de Castilla y León. Me temo que, para no ser tachado de ayudar a su tierra, todo lo que pueda empeorar lo hará bajo su mandato. Y es más que posible que a los postres salgan los pisos turísticos. En eso, todo lo que sea regular, protegiendo a un sector de vital importancia como el hotelero, será bienvenido.