Despilfarro del tiempo
Los estudios más recientes en España arrojan que los españoles tenemos de media unas 6 horas diarias de tiempo de uso del móvil
El tiempo es oro. La gente ahora prefiere tener más tiempo y cobrar menos. Necesito tiempo para mis cosas. No quiero perder tiempo en ir a una tienda, que me lo traigan a casa. Prefiero teletrabajar y así no pierdo tiempo en los desplazamientos. Yo ya no tengo tiempo para ver una película que dure más de una hora y media, como mucho un capítulo de 45 minutos… Todos estos ahorros al reloj son compresibles y humanos, pero, en muchos casos pierden todo su sentido cuando los segundos, minutos y horas ganadas se despilfarran sin hacer nada provechoso.
Los estudios más recientes en España arrojan que los españoles tenemos de media unas 6 horas diarias de tiempo de uso de nuestro teléfono móvil. Esto se puede ver en nuestros dispositivos de forma rápida. He hecho la prueba y no soy tan raro como pensaba y mi media diaria es de 5 horas y 52 minutos. Casi soy normal y estoy en la media. Yo consulté el tiempo que utilizo el móvil cada día y es que reconozco que a la mínima que me descuide puedo estar tirando a la basura tiempo mientras que no paro de ver recetas de cocina en la freidora de aire, por si algún día como sano, o historias de manitas construyendo cosas y en mi caso lo poco que sé hacer con mis manos es atarme los cordones. La de tiempo que perdemos moviendo el dedo deslizando la pantalla sin destino. Pocas veces se nos ocurre en la vida real salir a andar sin destino ninguno, pero en el mundo virtual casi nunca sabemos a dónde vamos.
Y miedo me da el futuro. Si a las generaciones anteriores ya les empezaba a costar eso de la jubilación y el famoso que no saben qué hacer en casa y les considero gente activa, no me quiero imaginar a los de mi edad y más jóvenes que en un santiamén estamos viendo vídeos de bebes chinos poniendo caras raras cuando comen un limón por primera vez, aunque realmente nos importe poco y no nos hagan ni gracia.
A los que nos jubilaremos dentro de 30 años nos tiene que preocupar cómo será nuestra pensión y qué vamos hacer cuando no trabajemos con todo ese tiempo libre. Como nos quedemos sin batería... Sí, todo el mundo tiene muchas cosas que hacer en mente cuando se jubila o está sin trabajar, pero después hay muchos que acaban sin hacer nada de provecho.
Cuidado con esta economía del tiempo. Estoy muy a favor de las nuevas tecnologías y que el teléfono móvil nos quite colas en el banco para hacer una transferencia o pagar un recibo, que nos evite salir a poner el ticket del coche en la zona azul o verde cada cierto tiempo o que puedas pedir una cita con el médico sin tener que llamar por teléfono, entre otras muchas ventajas. Lo que digo es que nos gastemos los ahorros temporales que ganamos con las facilidades de la revolución tecnológica en leer un buen libro en papel, salir a pasear, hacer deporte, tomarte algo con amigos o jugar con nuestros hijos a cualquier juego, que siempre será más provechoso que estar viendo en el móvil cosas que nunca vas a comprar, que no las vas utilizar jamás o a gente que no conoces de nada haciendo el gamba.
Por cierto, y esto de los móviles ya no es solo de los jóvenes que están todo el día pegados a las pantallas, que desde que los abuelos han aprendido a comprar por internet o navegar por facebook el vicio del móvil ya es intergeneracional.
El enésimo problema que tenemos como sociedad y ya van unos cuantos... En fin, que el fin del mundo no nos pille bailando, si no viendo estupideces en la pantalla del móvil.