Comienza el cónclave: 133 cardenales se encierran en la Capilla Sixtina para elegir al sucesor del papa Francisco

A las 17:46 horas de este miércoles, 7 de mayo, las puertas de la Capilla Sixtina se cerraron oficialmente para dar inicio al Cónclave, el proceso en el que los 133 cardenales electores designarán al 267º papa de la Iglesia Católica, sucesor de Francisco. La primera fumata, previsiblemente negra, podría verse entre las 18:00 y las 19:00 horas. Para que un cardenal sea elegido, deberá obtener al menos 89 votos, equivalentes a una mayoría cualificada de dos tercios del cónclave.

El cardenalPietro Parolin ha dado inicio a la ceremonia con unas palabras, tras las cuales los cardenales han recorrido en procesión los 30 metros entre la Capilla Paulina y la Capilla Sixtina, precedidos por la cruz alta y dos cirios. Uno a uno, han entrado invocando la intercesión de todos los santos, bajo la mirada del imponente fresco del Juicio Final de Miguel Ángel.

Los Museos Vaticanos habían cerrado el acceso a la Capilla Sixtina el pasado lunes para permitir los preparativos. Se instalaron las dos tradicionales estufas, que servirán para quemar las papeletas y emitir el humo negro o blanco, y se hicieron otras adaptaciones logísticas.

Los cardenales de rito latino portan la tradicional vestimenta roja, mientras que los de Iglesias orientales visten su hábito coral específico. Ya reunidos, entonaron el Veni Creator y pronunciaron el juramento de secreto, comprometiéndose a no revelar nada del proceso ni interferir en él. Cada uno colocó su mano sobre los Evangelios al declarar: «Prometo, me obligo y juro».

Acto seguido, el Maestro de Celebraciones Litúrgicas, Diego Ravelli, pronunció el tradicional «extra omnes», expulsando de la Capilla a todos los no participantes en el cónclave. Luego se dio lugar a una meditación privada antes de comenzar con la primera votación.

Durante todo el proceso, los cardenales permanecerán incomunicados del exterior. Desde las 15:00 horas, se han desactivado todos los sistemas de transmisión móvil dentro del Vaticano. La normativa vaticana establece que cualquier violación del secreto implica excomunión automática.

Si en esta primera jornada no hay elección, el jueves se celebrarán cuatro votaciones más, dos por la mañana y dos por la tarde. Las fumatas blancas se podrían ver alrededor de las 10:30, 12:30, 17:30 o 19:00, según el ritmo de votaciones. Si tras tres días no hay acuerdo, se hará una pausa de oración y diálogo.

De persistir el bloqueo tras cuatro series completas, se pasará a una votación entre los dos más votados, pero aún será necesario alcanzar los dos tercios. Una vez elegido, el nuevo papa será preguntado por su aceptación y por el nombre que desea adoptar.

Después, pasará a la llamada «habitación de las lágrimas» para vestirse con una de las tres sotanas blancas preparadas, antes de salir al balcón de la Basílica de San Pedro. Allí, tras el anuncio del Habemus Papam a cargo del cardenal protodiácono Dominique Mamberti, impartirá su primera Bendición Apostólica Urbi et Orbi.