Unionistas, de diez en Teruel (1-2)

El tanto nuestro de cada día de Slavy a los doce minutos de partido también ayudó mucho. Como lo hizo la semana pasada con el Sabadell o hace un mes frente al filial del Barça. «La clave es salir muy concentrado», desveló el ariete búlgaro (que ha igualado el récord de 12 tantos de De Miguel en una sola temporada en Primera Federación). Para cuando el delantero cedido por el Real Valladolid le ganó la partida a Cabetas, que tanto le gusta a Ponz, y a Taluby en el área pequeña para cabecear el balón a la red, el balón había pisado el área turolense tres ocasiones. El punto de break de la jugada estuvo en la incorporación de Ekatiz Jiménez, que tras hacerse con el balón ganó la línea de fondo y se sacó un centro al primer palo que Slavy, evidentemente, no iba a desaprovechar.

Con el resultado a favor Unionistas supo nadar y guardar la ropa con total solvencia. A Iván Martínez no le tiraron entre palos; y, sin embargo, sus diez compañeros de campo tuvieron la paciencia para aguantar los empellones turolenses y salir centelleantes hacia la meta de Taliby nada más recuperar la posesión del esférico. Así llegó, por ejemplo, un remate desde la frontal de Planas que se marchó lamiendo el poste. Sin embargo, ese control del choque saltó por los aires a dos minutos para el final de la primera parte, cuando en tierra de nadie Álvaro Gómez le estampó los tacos en la cara a Gaixas y que le costó la tarjeta roja. Se abría otro partido.

Evidentemente el Teruel dio un paso adelante por la superioridad numérica. Apa y Pascual tuvieron dos remates francos para haberle cambiado el pie al partido; sin embargo, ni la frivolité del taconazo de uno, ni el remate en semifallo del otro acabaron ni siquiera entre palos. Recuperado el aliento, Unionistas sentenció el choque con otra acción por la banda izquierda, en la que Ekatiz volvió a brillar. Antes del pase de la muerte, el lateral vasco se gustó con una bicicleta sobre Pascual que embelleció la obra rematada con el tanto de Rastrojo, que llegó de manera heterodoxa con el pecho. 1-2.

A partir de de ahí, el choque quedó visto para sentencia, por mucho que el Teruel —a diferencia de lo que hizo el Sabadell la semana pasada— no bajó los brazos y sumara ocasiones como para haber recortado el marcador antes del minuto 82 de partido, que fue cuando Guillem anotó a la salida del enésimo córner botado por el conjunto de Jardiel.

Esta victoria (la cuarta lejos del Reina Sofía en lo que va de curso en Liga) permite al conjunto blanquinego auparse de manera virtual a la 7ª plaza, que es la última que da acceso a la Copa, a la espera de lo que haga hoy el Arenteiro frente al Lugo este mismo domingo (19:00).