«Son locuras que merecen la pena»

A donde va Unionistas le sigue su afición, así lo ha demostrado desde que se echó a la carretera en sus primeros desplazamientos allá por la temporada 2015/16. «La afición de Unionistas ha cogido lo de ser viajera como un rasgo de identidad del club», comenta Jaime García, una de las muchas gargantas que acompañarán a los blanquinegros este sábado en el estadio Johan Cruyff contra el Barça Atlétic en la final por la salvación.

Unas horas después de conocer el resultado del duelo ante el Tarazona, los aficionados salmantinos se movilizaron para llenar las gradas del hogar del filial blaugrana, y Unionistas no tardó en responder. «En mi caso, he organizado el autobús para el partido y los aficionados se podían apuntar en mi tienda. Cuando llegué tenía una cola que me asusté hasta yo. Los vecinos me preguntaban qué regalaba para tener esa cola de gente, yo estaba alucinando», cuenta Ruba Zakour.

Con la ayuda de Unionistas, la Federación de Peñas y algún patrocinador, el lunes se anunciaba la salida de un autobús con destino a la ciudad condal a las 7 de la mañana el día del partido, y en apenas unas horas se ocupaban todas las plazas. «Desde fuera alguno puede pensar que, si merece la pena meterte 20 horas de autobús, pero la verdad es que no lo piensas. Lo que quieres es estar con el equipo y es como la sensación de: Yo no me lo puedo perder», explica Ruba Zakour.

Bien es cierto que a muchos esta situación no les sorprende ya que Unionistas siempre cuenta con presencia en las gradas allá donde va. «El unionismo es eso, es una familia que vamos a estar ahí como un partido más. Confiamos en volver de esta paliza tremenda que nos vamos a pegar alegres y contentos por la permanencia, pero si no se consigue, vamos a apoyar como se ha apoyado desde el principio. Estén en la categoría en la que estén», señala Víctor González, otro de los aficionados con sitio en el autobús con rumbo a la 'final' del sábado.

En la retina de muchos de los aficionados que viajan el sábado está el partido del playoff de Tercera División en Águilas, el 28 de mayo de 2017, uno de los tantos viajes que demuestra que Unionistas nunca está solo. «Salimos a las 12 de la noche de aquí y llegamos a las 9 de la mañana. Pero como ese viaje, está también el viaje a Ceuta. Son momentos que se guardan con mucho cariño, son locuras que merecen la pena», cuentan.

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