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J. García
Domingo, 10 de noviembre 2024, 19:32
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Unionistas visitaba Tajonar para verse las caras con el Osasuna Promesas en un partido correspondiente a la jornada 12 en el Grupo I de la Primera Federación. Los blanquinegros visitaban a la cantera rojilla con el objetivo de estrenar el casillero de victorias, sin embargo, enfrente esperaba un cuadro navarro que traía bajo el brazo la importante victoria lejos de casa ante el Sestao con la que pusieron punto y final a la racha de dos derrotas consecutivas.
Con el arranque de la contienda, el Osasuna Promesas ofrecía una mejor imagen que los blanquinegros, fruto todo ello de los tradicionales primeros diez minutos donde los conjuntos locales tiran más de corazón que de cabeza. Cumplido el minuto 2 de partido, Jon García, que aglomeraría la mayoría de acciones ofensivas del cuadro rojillo, enviaba un leve disparo a las manos de Iván Martínez. Osasuna Promesas continuaba buscando la portería charra hasta que Unionistas se desquitó de las cadenas y empezó a controlar el encuentro con y sin balón. Bien es cierto que cuando los blanquinegros vivían sus mejores minutos, una libre directo pudo condenar a Unionistas. Los pupilos de Dani Llácer pedían fuera de juego y el jugador del cuadro rojillo enviaba el cuero cerca del palo de Iván Martínez, sin embargo, si ese balón hubiese entrado era más que gol legal. Sin demasiados acercamientos moría una primera parte donde cada equipo había llevado las riendas del choque en diferentes momentos de la primera parte. Lo único a destacar fue la lesión de Martín Pedroarena en el cuadro rojillo, el máximo goleador del Osasuna Promesas abandonaba el campo entre lágrimas.
Tras el paso por vestuarios, la película no cambiaba demasiado respecto al primer tiempo. Iván Martínez se tenía que emplear a fondo para mantener las tablas con una gran estirada. La respuesta de Unionistas llegaría desde el banquillo con Dani Llácer dando entrada a Jonny Arriba y poco tardaron los charros en aprovechar ese nuevo aire en la última zona. Y es que, llegado al minuto 60, los blanquinegros protagonizaban una doble acción de peligro. Primero Pau Martínez y después Rastrojo, pero, en todas ellas el meta del cuadro local, Pablo Valencia, se sacaba dos grandes paradas para negar el gol a los jugadores del equipo charro. Cuando parecía que los porteros tomarían protagonismo, el encuentro volvió a una tónica pasiva con constantes cortes de juego que el colegiado resolvería con las primeras amarillas del choque.
Ni las entradas de Carlos de la Nava, Iván Moreno o, mover a Álvaro Gómez, hacían mover el marcador de un partido que parecía ofrecer más de lo que finalmente fue. Unionistas enlaza su quinto empate consecutivo como visitante.
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