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No hubo manera de evitarlo. Este Domingo de Resurrección fue todo lo contrario para un Guijuelo que consumó su descenso a Tercera Federación al caer 1-4 contra el Numancia. En las dos jornadas que restan los salmantinos ya no podrán alcanzar la puntuación necesaria para llegar al menos a la posición de 'play-out' y pierden la categoría tres temporadas después. Un día más no se les puede reprochar nada en cuanto a la actitud, pero han vuelto a adolecer del fútbol que hacía falta.
La tarde empezó como la de hace una semana: no se habían cumplido dos minutos cuando Moustapha, evidentemente sin querer, se introducía el balón en su portería tras una acción de Pana, que ya se disponía a rematar. 1-0 y alegría. Que duró poco, porque en el 11 empató el Numancia por mediación de Teijeira, aprovechando el garrafal error de Johan Guzmán, al que se le escapó un disparo sin peligro aparente.
Después, la nada. Tenían más ímpetu los sorianos, que sin embargo no eran capaces de crear peligro a un Guijuelo que acusaba los nervios. Como se vio a los 31 minutos: agarrón continuado, o eso pareció, de Ezkurdia a un Alain Ribeiro que tenía pocas opciones de llegar al balón. El árbitro pitó la pena máxima, además de mostrar la amarilla al zaguero local, y Jony no desaprovechó la oportunidad de poner el 1-2 en el marcador del Municipal Luis Ramos.
No mucho después fue el propio Ezkurdia el que reclamó un penalti tras ser golpeado cuando intentaba rematar una falta, pero Carbajales Gómez optó por no señalar nada.
Los últimos minutos de la primera mitad fueron un quiero y no puedo de los de Rubén Gala, con Carmona como protagonista. Primero, no llegando por poco a rematar un centro lateral, y después con un cabezazo que se marchó lamiendo uno de los palos de la portería de Dorronsoro, sin poder evitar la marcha a vestuarios con 1-2 que significaba el descenso de categoría.
Los diez primeros minutos de la reanudación dieron para muy poco, con un Numancia que intentaba hacer daño con salidas rápidas y un Guijuelo que seguía falto de ideas, por mucho que lo intentara.
En el 60, estuvo a punto de encontrar el empate, y un minuto después volvió a darse de bruces con la realidad al encajar el 1-3. Cristóbal se inventó un pase en profundidad a Pana, que disparó duro, pero se encontró con Dorronsoro. El balón acabó en córner y de su mala ejecución llegó la contra, con los chacineros volcados, con la que el Numancia hizo el 1-3, de nuevo obra de Jony.
Desde luego, Pana no se rendía y no mucho después volví a rozar el gol, pero seguía sin puntería. La pesadilla continuó con el cuarto de los sorianos, obra de Dieste en el 70 después de un saque de esquina y ya lo mejor para el Guijuelo hubiera sido que el crono corriera lo más rápido posible para empezar el duelo cuanto antes.
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