El atletismo salmantino respira ilusión en el Mundial de Budapest

Mario García Romo, con la experiencia acumulada del 4º puesto logrado en Eugene, también se postula en la lista de las medallas: «El objetivo es básicamente intentar ganar. Es el objetivo que he tenido siempre y es el objetivo que tengo ahora. Va a ser un nivel excepcional, yo creo que el mejor nivel de siempre, porque hay once atletas por debajo de 3:30 —entre los que se encuentra el propio García Romo—, pero creo que voy preparado, yo creo que he hecho todo el trabajo necesario para conseguirlo e independientemente del resultado que consiga, voy a estar muy contento con todo lo que he hecho y seguramente que eso me va a preparar muy bien también para París», explica García Romo.

Hasta la próxima semana no abrirá fuego la segunda baza salmantina. Y lo hará, sin saber el resultado y no hasta dónde llegará en los 800 metros femeninos, pues por primera vez en la historia de los Mundiales España presenta tres bazas en esta prueba en la categoría femenina: «Habla muy bien de nosotras. Llevamos reivindicándonos un par de años, y demuestra que nos merecíamos meetings, grandes pruebas, liebres... Para mí es un orgullo».