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Olga MY
Salamanca
Domingo, 8 de junio 2025, 10:36
Por lo general, los castillos y fortificaciones que se encuentran en España gozan de varios siglos de historia y han sido testigo de épocas pasadas, por esta razón, el curioso caso de un hombre que ha erigido un castillo con sus propias manos llama poderosamente la atención.
Se trata de Serafín Villarán, que en 1978 comenzó a construir el Castillo de las Cuevas en Cebolleros, el pueblo de su mujer, poniendo en marcha un sueño que no llegó a ver cumplido, dado que falleció en 1998 sin ver su gran obra terminada.
Tras su muerte, su hijas y su yerno, Luis Fernández, profesional de la construcción -a diferencia de Serafín, que no tenía ningún conocimiento ni recurso- han continuado la labor, engrandeciendo la obra hasta convertirla en lo que es hoy: un impresionante castillo de cinco plantas y 300 metros cuadrados.
Los materiales no son menos originales que la idea, pues la fortaleza se compone de piedras o cantos rodados cogidos del río Nela, que pasa por el pueblo. Estos han sido colocados cuidadosamente de forma manual sobre la estructura de dos antiguas bodegas.
Actualmente el castillo posee un bar en su interior en el que recibe a visitantes y curiosos que se acercan a conocer un espacio tan curioso. Su interior se puede visitar los fines de semana de junio y todos los días de julio y agosto. También es posible hacerlo en Semana Santa y festivos. La entrada es gratuita, únicamente piden un donativo para poder continuar con el mantenimiento de la construcción.
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