El reto de salvar la varroa creciente en la apicultura

La pasada jornada celebrada en la cooperativa Reina Kilama de San Miguel de Valero puso de manifiesto que el temor de los apicultores salmantinos respecto a la enfermedad de la varroa sigue más actual que nunca ya que, en los doce años de vigilancia de esta enfermedad, no se ha erradicado y, según los últimos datos, ha crecido incluso.

Así lo puso de manifiesto el jefe de Área de Epidemiología de la Subdirección General de Sanidad e Higiene Animal y Trazabilidad del Ministerio, Germán Cáceres, al hablar de las últimas cifras no publicadas aún: «Los resultados no son nada buenos, seguimos con las mismas cifras e inclusomás altas». Según algunas de las cifras aportadas por el experto, y con datos procedentes de un estudio de monitorización, debería haber una mortandad inferior al 10 % para hacer viable una explotación y «estamos al 15 %».

No existe un programa nacional de control y en el caso de Castilla y León mantiene la supervivencia del plan sanitario apícola con financiación propia y tiene en marcha un programa de monitorización para controlar la vespa velutina. En Salamanca se colocaron cinco trampas y fue en la unidad veterinaria de Vitigudino donde se detectaron. Los apicultores, por su parte, confían en la llegada de nuevas investigaciones y productos que ayuden a remitir el problema.

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