Bajadas del trigo y el maíz en la Lonja de Salamanca

Los motivos no fueron suficientes para los almacenistas, que insistieron un lunes más con las bajadas por «no haber hecho los deberes antes». «Aún habiendo cierta estabilidad hay que hacer una corrección en los precios y bajar trigo y maíz», pidió Víctor Rodríguez. También Jaime Jordán de Urriés insistió en la tendencia bajista recordando la diferencia de precios con otras lonjas cercanas, como León, «donde el diferencial es de 15 o 20 euros, lo que hace que en Salamanca estemos fuera de juego», aseguró. Muy directo también se mostró José Antonio Marcos, que aseguró que la debilidad del maíz «acabará por arrastrar al resto de productos».

Tampoco hubo acuerdo entre las dos partes, e incluso los agricultores criticaron a los operadores por «jugar a futurólogos» con lo que pasará cuando arranque la cosecha de maíz en la provincia. «¿O es que ahora tenéis una bola de cristal»?, les preguntó Herminio Velasco.

La Lonja de Salamanca se desmarcó del resto de mesas nacionales y repitió los lechazos tras un debate donde los primeros en pedir no tocar las cotizaciones fueron los ganaderos. «No entiendo la postura de de algunos compradores pidiendo subidas tan altas para los lechazos si no es porque quieren reventar la Lonja», criticó Celestino Martín, en el lado de los productores, donde en cambio sí se apoyó una subida «progresiva» en el precio de los corderos.

En el ibérico, la decisión de la presidenta de la mesa, Nieves García, fue la de subir 0,01 el cebo para acortar la «distancia» con Extremadura. «Tenemos una diferencia de 12 céntimos; estamos muy desfasados», denunció el ganadero Fernando García, «y además en el cebo de campo las perspectivas que hay son buenas», apuntó. Por contra, los industriales insistieron con la repetición. « Se operan por Lonja y no hay nada especial que indique un cambio de tendencia», aseguró Fernando Santos.