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Sábado, 9 de noviembre 2024, 06:00
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Un veinteañero se sentará este lunes en el banquillo de acusados por el violento asalto a un ciudadano ocurrido el pasado mes de marzo en el parque de los Jesuitas. La Fiscalía acusa a Z.V.A.C. de un delito consumado de robo con violencia con la agravante de reincidencia y con medio peligroso, así como de otro de lesiones.
El fiscal del caso solicita para el acusado una condena total de siete años de prisión (por el primer delito cinco años de prisión y por el segundo dos años), así como las costas del juicio. Reclama además el pago de una indemnización de 2.753 euros por las lesiones y los perjucios sufridos.
El acusado cuenta con antecedentes penales tras haber sido condenado en sentencia firme por otro delito de robo con violencia a la pena de un año de prisión, pena que se encuentra suspendida pero que de ser condenado debería ahora sí cumplir.
Sobre las 21:00 horas del pasado 9 de marzo, relata el fiscal en su escrito de calificación profesional, el acusado se encontraba con otros dos varones y una mujer sentados en un banco en el concurrido parque mientras en las inmediaciones había otros grupos de chicos y chicas en otros bancos del recinto para 'rapear'.
Se dirigió entonces hacia ellos el afectado, quien, pese a no conocerlos de nada, comenzó a hacer preguntas y comentarios que molestaron al acusado, particularmente cuando realizó comentarios de índole sexual hacia la mujer del grupo, relata el Ministerio Fiscal.
Ello provocó que los dos varones se encararan, rompiéndose la botella de cristal de la que estaba bebiendo el acusado, la cual cogió y la esgrimió hacia el cuello del afectado al tiempo que le exigió: «Dame lo que lleves o te mato». Este hizo caso omiso y se revolvió contra el grupo de chicos, ante lo que el acusado y otros varones que no han podido ser identificados arrojaron al suelo a la víctima y acto seguido comenzaron a propinarle patadas en el cuerpo y en la cabeza, apoderándose finalmente de las llaves de su domicilio y de su vehículo, tras lo que se marcharon del lugar.
Como consecuencia de todo ello, el perjudicado sufrió contusiones en cabeza, costilla, extremidades, región lumbar izquierda, ambos codos y rodilla. Para su curación precisó tratamiento médico odontológico, no habiéndole quedado ninguna secuela, señala el fiscal.
La víctima formuló denuncia y reclamó por estos hechos la cantidad de 68 euros por la reposición de las llaves y el cambio de cerradura, la cantidad de 1.255 euros en que fue presupuestado el tratamiento odontológico y la cantidad de 80 euros por la cazadora que portaba y resultó dañada al ser arrojado al suelo.
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