Un octogenario de la Sierra de Francia se enfrenta a la cárcel por maltrato continuado a su esposa

Los hechos se remontan al 9 de agosto del pasado año. Según relata la Fiscalía, alrededor de las 11:30 horas, el varón -que a día de hoy tiene 82 años de edad y carece de antecedentes penales- se encontraba en el domicilio familiar y, con ánimo de alterar la paz y tranquilidad de su esposa, le dijo que la iba a matar y que iba a prender fuego a la casa con ella dentro. Hechos que al parecer se llevan repitiendo desde hace mucho tiempo, acompañados de insultos y expresiones vejatorias.

Días después, el 24 de agosto de ese mismo año, prosigue el Ministerio Fiscal, se inició una discusión en la vivienda, en el curso de la que el acusado, con ánimo de menoscabar su integridad física, golpeó a la mujer con una silla y la empujó contra la pared, causándole una lumbalgia postraumática, de la que tardó en curar diez días.

Precisa el Ministerio Público que en el momento de los hechos el acusado padecía un deterioro cognitivo con alteraciones de conducta y componente celotípico -un trastorno delirante irreversible y multifactorial que hace pensar al paciente que su pareja es infiel-. La citada patología afectaba a sus capacidades cognitivas y volitivas, pudiendo llegar a anularlas, tal y como consta en un informe médico forense emitido con fecha de 25 de septiembre del pasado año.

Un mes antes, el Juzgado de Instrucción número Uno de Béjar había impuesto al presunto maltratador la medida cautelar de prohibición de aproximación a una distancia inferior de 250 metros y prohibición de comunicación con su esposa.

La Fiscalía acusa al octogenario de un delito de maltrato familiar y de un delito de amenazas en el ámbito de la violencia de género, con la concurrencia en su caso de la atenuante de alteración psíquica.

Conforme a ello, solicita que se le imponga por el primer delito, maltrato familiar: once meses de prisión, privación del derecho a la tenencia y porte de armas por un tiempo de dos años y prohibición de aproximación a 250 metros de la afectada, de su domicilio o lugar de trabajo o cualquier otro frecuentado por ella, así como de comunicarse con la misma por cualquier medio, por tiempo de dos años.

Por el delito de amenazas solicita: once meses de prisión, dos años sin armas y dos años de alejamiento e incomunicación con la víctima.

Asimismo, le pide el pago de una indemnización por importe de 430 euros por las lesiones sufridas.

012: Teléfono de información a la mujer de Castilla y León