Trabajo contra reloj para salvar la temporada de caza tras el golpe del TSJ

Juan Carlos Suárez-Quiñones, consejero de Fomento, afirmó ayer en Salamanca que ya están realizando consultas con otros partidos políticos para adoptar “una decisión adecuada y rápida para los intereses de Castilla y León”. Suárez-Quiñones reconoció que existe el riesgo de que el auto judicial puede suspender la actividad durante mucho tiempo, aunque confía en alcanzar un acuerdo que permita desarrollar la caza con normalidad y primar “los intereses generales sobre los de un pequeño grupo”, en referencia a PACMA, la organización que ha conseguido la suspensión.

La importancia de la caza en el medio rural salta a la vista. El sector genera en la provincia 80 millones de euros, un montante importante ya que Salamanca cuenta con alrededor de 18.000 licencias de caza, aunque solo más de medio millar están federados. Una suspensión de la actividad generaría también un perjuicio económico para los cazadores, que han de pagar 42,65 euros a la Junta solo por la licencia de tipo general, aunque hay bonificaciones para determinados colectivos.

La Federación Regional de Caza, cuyos representantes mantuvieron ayer un encuentro con la Consejería de Fomento, sostienen que la suspensión cautelar no se hará efectiva hasta que se publique en el Boletín Oficial de Castilla y León. Además, confían en que el cambio normativo de la Junta llegue lo suficientemente pronto para evitar perjuicios en lo que queda temporada y en la nueva. Hay que recordar que el TSJ ya anuló determinados preceptos del Decreto 32/2015 en 2017. Para solucionar los problemas, la Consejería de Fomento aprobó el Decreto 10/2018, que ahora ha sido suspendido porque el informe sobre poblaciones de especies cinegéticas en el que se basa no utiliza datos actualizados y suficientemente contrastados, según el tribunal.

Los cazadores y la propia Administración regional defienden que la caza es una actividad con un gran arraigo en la Comunidad y que repercute de manera positiva en el territorio. Además del dinero que mueve, y no solo de manera directa, también desde el punto de estancias y hostelería por ejemplo, representa una vía para el control de poblaciones de determinadas especies que no cuentan con depredadores naturales. A esto se suma que constituyen una forma de supervisar la sanidad animal y la posible transmisión de enfermedades al ganado doméstico, además de actuar de manera preventiva en cuanto a daños que puedan ocasionar a los cultivos.

El presidente regional del PP y candidato a la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, estuvo con el consejero en la visita a la estación de autobuses y también mostró su compromiso con la caza. “Son muchos los intereses que están en juego y no solo en defensa de nuestra cultura y tradiciones, también de puestos de trabajo, riqueza o fijación de la población en el mundo rural”, subrayó. El presidente popular insistió en que hay otros elementos que aconsejan el mantenimiento de la caza, ya que es un recurso para controlar la sanidad animal y defender la seguridad vial. “Hay que tomar la decisión más rápida y ágil para blindar la caza en Castilla y León”, sostuvo.