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Los talleres salmantinos están saturados. Son especialmente los más pequeños e independientes los que se encuentran en una situación que no habían vivido hasta ahora, la de tener que decir a clientes de toda la vida que para poder arreglar su coche tienen que esperan una lista de espera.
Los motivos que llevan a esta situación son variados, si bien es cierto que son la falta de personal cualificado y el envejecimiento del parque automovilístico las claves para llegar a entender este asunto.
El presidente de la Asociación de Empresarios Salmantinos de Talleres, Sergio Pérez, señalaba que el sector «está trabajando muy bien a lo largo de los últimos tiempos». Explicaba que el principal problema es «el envejecimiento del parque automovilístico que es el más antiguo de Europa». Pérez señalaba que sería importante que hubiera una bonificación para la compra de motores de combustión tradicionales: «Hay ayudas para que la gente pueda acceder a la compra de coches eléctricos e híbridos, pero no para que la gente por ejemplo pueda cambiar el diésel por el gasolina. Eso sería muy importante para ir renovando el parque automovilístico.
Tomás Chamorro, propietario de un taller independiente situaba a la falta mano de obra como la causante de esta situación de saturación: «El principal problema que nos encontramos es la falta e mano de obra cualificado. Por norma general hay un problema en la formación y después que los jóvenes que llegan no quieren trabajar». Chamorro señalaba también que si para arreglar un coche ya hay que esperar, cuando es necesario pintarlo el tema se dilata aún más: «No encontramos profesionales, nosotros hemos rebajado la plantilla y en buena medida ha sido porque no llegan con esa cualificación necesaria. Tampoco ayuda mucho la situación actual en la que contratar al final es meterte en problemas», indicaba.
Carlos López es mecánico de otro pequeño taller de barrio. En este caso manifestaba que la situación económica está llevando a que muchas familias tampoco hagan un buen mantenimiento de su vehículo. «Estamos viendo como los propietarios circulan a veces con los neumáticos lisos y cambian el aceite con muchos más kilómetros de lo que deberían. Eso se debe a la asfixia económica, ya que solo revisan el coche cuando tienen que acudir a pasar la Inspección Técnica de Vehículos».
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