La 'marea roja' de Aviva inunda de empatía y solidaridad las calles de Salamanca

Salamanca ha vuelto a convertirse en el altavoz de los derechos de las personas con discapacidad. Lo ha hecho acogiendo, por decimoquinto año consecutivo la Carrera Popular y Solidaria de los Mil Pasos de la Fundación Aviva, reflejando la lucha incansable que la asociación lleva acometiendo durante tanto tiempo por conseguir la inclusión social y la igualdad de oportunidades de este colectivo.

La carrera solidaria e intergeneracional en la que colabora LA GACETA, ha difundido un objetivo claro: es clave concienciar y normalizar la discapacidad a través del deporte. Y, esta vez, como ha sucedido en ediciones anteriores, la Fundación Aviva lo ha hecho reuniendo a decenas de deportistas y ciudadanos salmantinos que han defendido por las calles salmantinas las capacidades y los derechos de todas las personas. Una vez más, esta iniciativa ha sido un evento único en el que se han dado la mano el espíritu deportivo y la superación personal.

"¡Aviva aviva!". Con los cánticos con el nombre de la fundación organizadora y emoción en las voces, los participantes de la carrera arrancaron su recorrido por las calles de la ciudad para dejar claro que la solidaridad y la inclusión son valores que, en Salamanca, se conocen muy bien.

A partir de las 10:30 horas de la mañana, una gran 'marea roja' ha participado en dos pruebas: la primera ha estado dirigida a los deportistas con capacidad para recorrer seis kilómetros por las calles de la ciudad y la segunda ha sido de carácter universal de dos kilómetros.

“Llevamos viniendo mogollón de años. El año pasado, nos llovió mucho y hubo otro que pasamos muchísimo frío, pero no importa. Nada nos quita las ganas de participar porque es un día muy especial. Es una oportunidad de dar a conocer todo lo que hace Aviva”, explica Susana Valverde, madre de Isabel una joven con una discapacidad.

Esta cita, cada año, congrega a personas de todas las edades y procedencias. “Nosotras somos de Cáceres y venimos solo para la carrera. Tenemos ya tres años viniendo y los que nos quedan. Hoy el día no acompaña, pero, con un chubasquero, sacamos muy bien la aventura”, bromea Natalia Pérez, una participante en la actividad.

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