Loterías elige un lienzo del Museo de Salamanca como imagen del cupón de Navidad
«La Natividad de la Virgen», del artista barroco Juan García de Miranda, es la obra seleccionada, una pintura realizada entre finales del siglo XVII y principios del XVIII
Loterías siempre ha apostado por una imagen con profundos valores navideños para ilustrar los décimos del principal sorteo extraordinario anual: la lotería de Navidad. Esta ocasión, la imagen elegida para dar contenido a estos décimos tiene un claro color salmantino, ya que la pieza seleccionada para la ocasión forma parte de los fondos del Museo de Salamanca y se encuentra expuesta en una de sus salas dedicadas a la pintura, aunque la propiedad es del Museo del Prado, que desde hace medio siglo se encuentra prestada al museo salmantino.
«La Natividad de la Virgen» es el título del óleo sobre lienzo escogido para este año por Loterías y Apuestas del Estado, una pintura realizada por el artista barroco Juan García de Miranda y que reúne todos los requisitos para cumplir con esta función: «esperanza, familia, renacimiento y espiritualidad; una escena que transmite calma y protección, y que evoca el calor de hogar en estas fechas tan esperadas», subrayan fuentes de Loterías.
«La Natividad de la Virgen» está considerada como una de las obras más importantes de García de Miranda, pintada entre finales del siglo XVII y principios del XVIII y, aunque se trata de un depósito del Museo del Prado, procede de la colección de la desamortización de los conventos y no de las colecciones reales.
En cuanto a su autor, el madrileño Juan García de Miranda destaca por el hecho de ser manco de nacimiento, lo que le obligó a pintar siempre con la mano izquierda. Además de formarse con Juan Delgado, tuvo acceso a las colecciones reales del Palacio, por lo que conoció de primera mano la pintura de los grandes maestros venecianos y flamencos. «Y tuvo como referentes a Rubens y Velázquez», subraya el director del Museo de Salamanca, Alberto Bescós, consciente de que gracias a esta imagen el Museo de Salamanca será dado a conocer en todo el mundo. «Para nosotros eso es siempre muy positivo», apostilla.
Tras el incendio del Real Alcázar en la Nochebuena de 1734, García de Miranda fue nombrado, junto con Andrés de la Calleja, restaurador de las obras rescatadas del fuego, entre ellas «Las Meninas», de Velázquez, y otras piezas maestras. Esta labor le permitió ser nombrado, en abril de 1735, pintor de cámara de Felipe V.
El trabajo más importante en la producción pictórica de Juan García Miranda son obras realizadas para diversos conventos e iglesias. A estos encargos pertenecen «Escena de la vida de san Diego de Alcalá» (1730) y «La Vida de Santa Teresa» (1735).
En las pinturas de García de Miranda destacan los grandiosos escenarios arquitectónicos en los que se insertan las figuras de tamaño reducido, a base de pórticos, arquerías, galerías abovedadas y ricos pavimentos iluminados por efectistas contrastes de luz que ponen de manifiesto el interés del pintor por los efectos escenográficos y de perspectiva. Todo ello recuerda el estilo de la corte de Carlos II.