Salamanca convertirá en hidrógeno y biometano los residuos de su depuradora
Aqualia estrena el nuevo Centro de Innovación en el Ciclo Integral del Agua
El alcalde de Salamanca, Carlos García Carbayo, y el director de zona de Aqualia, Juan Carlos Rey, destaparon ayer la placa conmemorativa del Centro de Innovación en el Ciclo Integral del Agua en la Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR) de Salamanca, un gesto con el que se puso en marcha y que busca convertir a Salamanca en el epicentro de la innovación de la compañía, «talento salmantino que va a ayudar a dar servicio a casi 45 millones de personas en los 20 países» en los que trabaja Aqualia, según explicó ayer su director de Innovación y Tecnología, Frank Rogalla, durante el acto de presentación en las instalaciones.
Se trata de una iniciativa internacional financiada con fondos europeos y liderada por la empresa adjudicataria del servicio de aguas de la capital que tiene dos patas.
Desde el centro se desarrollará por un lado el proyecto «Eclosion» para la generación de hidrógeno renovable y biometano a partir de biorresiduos, entre ellos los que aporten empresas salmantinas y los lodos residuales de la EDAR. En su ejecución están involucradas ocho empresas, así como 10 universidades y centros de investigación. La segunda de las iniciativas es el proyecto europeo Rewaise, perteneciente a la convocatoria H2020 en la que participan 25 entidades de 11 países europeos, principalmente empresas gestoras del agua, universidades y centros de investigación.
La iniciativa conecta una red de laboratorios para demostrar tecnologías innovadoras y nuevas estrategias operativas que impulsen el modelo de economía circular, además de desarrollar herramientas digitales para alcanzar la meta de una sociedad inteligente en torno al uso del agua. Pero es que, además, desde el centro de Salamanca se van a coordinar actividades de alcance internacional, nacional y regional como la estación para generar bioplásticos y biogas en Guijuelo a partir de residuos de las fábricas de la localidad.
Dos acciones basadas en la innovación y la digitalización que para Pedro Rodríguez Medina, director de Operaciones y Tecnología de Aqualia, serán las muletas para abordar el reto de «dar agua en cantidad, calidad y presión adecuadas, así como devolverla sin daño al cauce, lo que exige un nivel tecnológico del que esta planta es un ejemplo».
Precisamente Carbayo destacó que la innovación y el desarrollo tecnológico casan «perfectamente» con el modelo económico complementario que en el que ya trabaja el Consistorio basado en el conocimiento.
«Necesitamos invertir en investigación y desarrollo, así que bienvenido un centro más», se congratuló el primer edil tras repasar las acciones municipales para impulsar la futura Bioincubadora, el Centro de Innovación Tecnológica y el de Inteligencia Artificial que visitará el próximo viernes. Campos en los que invierte el Ayuntamiento por convicción, «ya que no son competencia estrictamente municipal».