Gato Charro, el trompetista salmantino de Leiva fan de Robe

Álvaro Pacheco Plaza, conocido artísticamente como Gato Charro, por sus raíces salmantinas, es un conocido trompetista de la comarca de Ciudad Rodrigo que forma parte de la banda de Leiva. Comenzó su trayectoria musical a los ocho años y ha trabajado con artistas como Xoel López, Pereza o Joaquín Sabina.

Su hermano Roberto Pacheco, ha sido un figura clave en su carrera, no solo ha compartido con él la pasión por la música sino que también le ha acompañado siempre produciendo varios de sus discos. Juntos han creado 'Dame cuerda' y'En un balancín'.

Gato Charro no se incluye en un solo género musical, sino que busca aquello que le emocione y le haga sentir. «No tengo un género que me guste más que otro. Me da igual un copla, una balada, una rumba, un reggae o un rock», afirma. Actualmente, su artista más escuchado es Robe. «Como puede verse en mi spotify y como era de esperar, Robe lidera mis listas de reproducción».

Sobre la influencia musical en su carrera cuenta: «Mi bisabuelo era tamborilero y mi padre baterista. Siempre he tenido una fuente de la que beber gracias a mi familia. He estado viendo conciertos desde muy pequeño, desde charangas y orquestas hasta bandas de música y grupos de cualquier estilo, en salas pequeñas, grandes o en estadios. Cada nota de cada música que he escuchado me ha influenciado».

En cuanto a la lectura, Gato Charro lo tiene claro. «No puedo leer mientras escucho música. Cuando leo, necesito estar en un momento de tranquilidad y concentración. Si hay música de fondo, mi oído se pone a analizar la letra o los acordes, interrumpiendo mi concentración». En este momento, está intentando retomar el hábito de leer con «Ikigai» de Héctor García y Francesc Miralles, después de haber leído 'La Uruguaya', de Pedro Mairal, una novela argentina que le pareció especial por estar ambientada en algunos lugares que conoció durante una gira en la que participó hace años.

Para la temporada estival, el músico recomienda, 'Son de lunares'de El Capullo de Jerez, reflejando su gusto por los ritmos alegres. A pesar de que no considera que haya un libro primordial en su carrera, subraya 'La verdad sobre el caso de Harry Quebert', de Joël Dicker como una publicación que realmente llamó su atención. «Es el primer libro que no podía soltar, iba andando por la calle mientras leía y eso nunca me había pasado» relata Álvaro Pacheco.

Este verano, Álvaro Pacheco tiene en mente seguir girando con Xoel López y aprovechar estos viajes para leer. También quiere visitar su pueblo cerca de Ciudad Rodrigo, Espeja, donde se siente en casa y rodeado de su gente de toda la vida. «Invito a escuchar 'Tranquilidad', una canción de mi segundo disco, para entender un poco más mi conexión con este lugar», añade.

Para los jóvenes salmantinos, Gato Charro recomienda ante todo tener paciencia, sobre todo en una época donde todo urge y todo corre prisa: «Tocar un instrumento te hace bajar a tierra. Se necesita tiempo para aprender y toda una vida para dominarlo. Se crea una conexión muy especial entre el instrumento y el instrumentista. Recomiendo a todos que toquen cualquier instrumento para experimentar esta conexión única».

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