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Lucía Galindo
Salamanca
Lunes, 1 de julio 2024, 22:16
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El programa «Vacaciones en Paz» de la asociación Amigos del Pueblo Saharaui dio comienzo a su edición de 2024 este lunes por la tarde, dando la bienvenida a los cinco primeros menores saharauis de los catorce que pasarán los meses de julio y agosto en la provincia de Salamanca. La acogida de las familias se realizó a las 18 horas en la sede de Cruz Roja de la ciudad. Estos niños, que tienen entre ocho y nueve años, proceden de los campamentos de Dajla, Aaiún, Bojador, Auserd y Smara, en el suroeste de Argelia.
María Remedios y Gonzalo, padres de acogida de Adam, cuentan cómo dieron con el programa: «Un día, leyendo el periódico, descubrimos que no había suficientes familias este año, así que decidimos probar suerte. Es nuestra primera vez acogiendo a un niño, aunque conocemos a personas que lo han hecho antes y dicen que es muy especial. Nos emocionaba mucho, aunque también nos asustaba un poco la adaptación del niño porque queríamos que fuera muy feliz. La preparación fue sencilla, solo tuvimos que hacer unas entrevistas y solicitar el certificado de delitos sexuales». señalan.
Juan, otro padre de acogida con experiencia previa, comparte que aunque el año pasado no fue la mejor experiencia, confían en que este año será mejor. «Nos vamos de vacaciones a La Manga y tenemos todo preparado para él. La responsabilidad con el niño te llena mucho más de lo que supone económicamente», añadió.
En cuanto a la dirección de la asociación, Ángeles Giménez, presidenta de AMPUSASA en Salamanca y Castilla y León, explica: «Desde 1997, difundimos el programa, actualmente lo hacemos a través de redes y medios. El desafío más grande es encontrar familias, probablemente debido a las crisis en España. Hemos tenido hasta 60 niños, pero seguimos con ganas. Cada familia tiene un responsable disponible las 24 horas para cualquier necesidad. El impacto de estos niños es fuerte; vienen de una situación muy complicada. Les diría a las familias salmantinas que vivan esta experiencia, ya que los niños dan mucho más de lo que reciben», manifiesta Ángeles Giménez.
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