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Audrey Hepburn es uno de los iconos más representativos y conocidos del Hollywood de la segunda mitad del siglo XX. Desde que ganó un Óscar a Mejor Actriz en 1954 gracias a 'Vacaciones en Roma', la actriz belga se convirtió en un auténtico emblema del estilo y la elegancia capaz de embelesarnos con su 'Desayuno con diamantes' frente al escaparate de Tiffany, cautivarnos con su voz en 'My fair Lady', o hacernos pasar un mal rato con la tensión acumulada durante 'Sola en la oscuridad'.
Y es que una actriz tan polifacética cuyo legado aún pervive en la memoria colectiva internacional se merece un obra que haga homenaje a su carrera, algo que también ha pensado su hijo Sean Hepburn Ferrer, que ha decidido impulsar un musical basado en la vida de su madre y cuyo estreno mundial tendrá lugar nada y más y nada menos que en España.
«Buscando a Audrey» llevará a cabo su presentación en Madrid en 2025, y según ha relatado este martes Ferrer «no se trata del clásico musical contando la biografía de su vida», ya que «cuando a mi madre le propusieron escribir su biografía, ella siempre contestaba: 'A mi no me ha pasado nada. Solo he ido a trabajar y a la gente le ha gustado'»
Esta será la segunda vez que el icono hollywoodiense pise la capital de España, ya que en 1964 los madrileños la pudieron ver aterrizando en el aeropuerto de Barajas, paseando por la Gran Vía, junto a Lucía Bosé en la Plaza de Toros de las Ventas o comprando viandas en diferentes puntos de la ciudad como en Mantequerías Leonesas.
Lo que mucha menos gente sabe es que Audrey Hepburn y su marido por aquel entonces, Mel Ferrer, también visitaron Salamanca en aquel año. Los padres de Sean se alojaron en el desaparecido e icónico 'Gran Hotel' el miércoles 3 de junio con motivo del rodaje de la película 'El señor de la Salle', en la que participaba él como protagonista.
Este film dirigido por Luis César Amadori que trata sobre la vida de San Juan Bautista de La Salle, tuvo como escenario distintos puntos de la ciudad, siendo el primero de ellos la Catedral Nueva, donde, según se hizo eco LA GACETA aquel año, «Mel Ferrer, apenas llegó a Salamanca y después de tomar un refrigerio, se incorporó al equipo viviendo un personaje que según ha declarado él mismo, le ha interesado profundamente.»
Ferrer llegó al hotel a «última hora de la tarde acompañado de su encantadora esposa y excepcional actriz, Audrey Hepburn», y en los días posteriores, además de realizar algunas tomas con el coro de la Catedral simulando a la iglesia de Reims, también rodaron escenas en «la capilla de la Universidad y otras secuencias exteriores», prolongando seguramente la producción hasta el sábado de aquella semana.
De hecho, los salmantinos pudieron ver con sus propios ojos la producción de diferentes escenas en las que también participaron estrellas cinematográficas de la época como Ángel Picazo, Lina Rosales, Nuria Torray, José Marco Davó, Fernando Rey, Tomás Blanco, Rafael Rivelles, Jesús Tordesillas o Mabel Karr.
No obstante, no tenemos tanta certeza de que la famosa actriz fuese vista por la población local paseándose por la capital charra para disfrutar de sus monumentos y delicias gastronómicas ya que no contamos con fotografías que lo prueben, por lo que tendremos que dejar volar nuestra imaginación para ver a la protagonista de Charada en medio de la Plaza Mayor probando por primera vez un trozo de hornazo.
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