Tradición montañera con sabor a huevos fritos

Es una de las citas que más interés despierta entre los aficionados a la montaña y al senderismo en la comarca de Béjar y ayer celebró una edición más en una espléndida mañana de invierno.

El club de montañeros «Sierra de Béjar» reunió a un centenar de personas en torno a la marcha con la que inician el calendario de actividades al aire libre que ocupará prácticamente todos los fines de semana.

La 'ruta de los huevos fritos' permitió disfrutar de uno de los parajes más famosos de Béjar, la Peña de la Cruz, en un recorrido de 16 kilómetros de longitud y tramos de montaña hasta los 1.600 metros de altitud. La marcha comenzó en el parque municipal de La Corredera para subir después por el camino viejo de Candelario, el paraje de Llano Alto y tomar el camino de Los Paporros. Desde allí, los participantes subieron hasta parajes como Arrebatacapas y El Tiesto con la idea de coronar Peña Negra, pero una cacería que se estaba celebrando impidió el ascenso y los montañeros tuvieron que acortar el recorrido para llegar a la Peña de la Cruz.

Allí, desde por la mañana temprana, un grupo de integrantes del club se centró en los preparativos para el gran convite organizado para recompensar a los participantes.

Nada menos que 17 docenas de huevos, 15 kilos de chorizo normal y picante, junto con otros 12 de panceta para disfrutar de un gran almuerzo en un día con temperaturas bajas, pero cielos despejados, en el que se agradecía el calor del sol para suavizar el frío.

Según detalló el presidente del club, Javier Yuste, a la tradicional cita acudieron montañeros del grupo Almanzor de Gredos, en la provincia de Ávila, junto con senderistas de Guijuelo, Salamanca, Zamora y, también, Extremadura.

Los participantes llegaron a la Peña de la Cruz en torno a las dos de la tarde y aguardaron la fila para recibir las raciones de huevos fritos, chorizo y panceta, junto a su correspondiente bebida y pan, para después descansar del largo trayecto e iniciar el regreso a Béjar tras una intensa jornada al aire libre con las espectaculares vistas de la Sierra de Béjar y Candelario como fondo.

De este modo, el club de montañeros cierra una intensa campaña navideña en la que también celebró la Nochevieja con una subida hasta la Peña de la Cruz, el pasado 29 de diciembre, en un recorrido nocturno con gélidas temperaturas que no restaron ganas de celebrar la llegada del Año Nuevo.

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