Miguel Ángel Luengo: «El Ofertorio y La Loa son nuestra más pura esencia y lo que hace que La Alberca se distinga del resto»

El verano en la localidad serrana de La Alberca siempre es un discurrir de personas que se entremezclan con los moradores de sus angostas calles, dando una pincelada especial a estos calurosos meses. A escasos días del Diagosto, una de la grandes cita del año, el alcalde Miguel Ángel Luengo analiza los festejos y los proyectos futuros del municipio, en el que el cuidado del casco histórico y la singularidad albercana son una prioridad.

¿Qué destacaría del programa festivo de este año?

—Siempre decimos y siempre destacamos el Ofertorio y La Loa, tal y como marca la tradición. Son nuestra más pura esencia y lo que hace que La Alberca se distinga y es nuestra seña de identidad. El momento de la ofrenda a la Virgen, con las danzas, con el traje de vistas albercano, en nuestra Plaza Mayor, junto con la lucha entre el bien y el mal en la representación de La Loa, declarada de Interés Turístico Nacional y Patrimonio Inmaterial.

¿Del resto de la programación con qué se quedaría?

—Diría que lo demás actúa como complemento a los dos actos que le mencioné antes. Tenemos teatro, folklore, exposiciones, presentaciones de libros, un día dedicado a los niños, actuaciones para mayores, citas culturales, etcétera. Como es obvio no faltarán las verbenas o la novillada. Aunque es un trabajo arduo, desde el Ayuntamiento buscamos ofrecer actividades para todas las edades y gustos.

¿Qué motivos han decantado la elección del pregonero de este año?

— José Manuel Polo tiene un vínculo especial con nuestro pueblo, ya que durante muchos años fue el coordinador de la zona de salud y ahora, tras su jubilación, queríamos agradecer su labor. Pero a la vez, es un claro guiño a la defensa de la sanidad pública en el mundo rural, que nos es tan necesaria.

La Alberca en verano siempre es un hervidero de personas ¿Es quizás este el momento de mayor concentración de población?

—Sí, la verdad es que en estos días vamos a quintuplicar el número de habitantes, cómo mínimo, e incluso durante esos momentos puntuales del Ofertorio o La Loa ese número es mucho mayor. Durante todo agosto hay mucha gente y se nota en cómo están las calles, los comercios, los restaurantes, los hoteles... Siempre suelo preguntarles y tienen una ocupación del 100%. Pero también se contrasta con datos objetivos, como los aparcamientos y el paso de visitantes por la Oficina de Turismo. Sí es cierto que este año la sensación es que no hay tanta aglomeración como en otros veranos y eso hace que las visitas a nuestra villa sean muy agradables.

¿Qué proyectos hay encima de la mesa del alcalde?

—Estamos trabajando en el arreglo de la residencia y del colegio. Déjeme decir que este año tenemos un desdoblamiento de una de las aulas, es decir, tendremos un maestro más en plantilla porque se mantiene el número de alumnos y es muy importante. Tenemos entre manos también el Punto Limpio que nos permitirá solucionar un problema importante; estamos preparando obras de abastecimiento de aguas, arreglo de caminos... Y seguimos pendientes de la resolución del 2% Cultural para acometer una rehabilitación del teatro tal y como se merece, ya que hablamos de un edificio histórico que merece un mejor empaque.

Otro punto de interés es el Plan de Protección Integral del casco histórico de La Alberca ¿En qué fase se encuentra?

—Estoy muy contento con este proyecto, sobre todo porque a veces estas acciones pueden causar cierta controversia, pero no ha sido así. Se aprobó inicialmente, ahora está en periodo de alegaciones. Es una herramienta que vuelca la responsabilidad en el Consistorio, junto con Patrimonio, ya que seremos los que tengamos que decidir los proyectos y por ello tiene que ser un documento muy elaborado, muy trabajado y muy estricto, pero muy necesario, porque somos conscientes de que solo así vamos a poder cuidar nuestra arquitectura y seguir siendo destacados en todo el mundo por nuestro bello entorno urbano.

Quedan muchos meses aún, pero la Navidad se ha convertido en otra referencia albercana tras el año pasado ¿Seguirá apostando el Consistorio por esas fechas?

—Sí, hay que aprovechar todas las oportunidades y subirse a los trenes cuando pasan. El año pasado tuvimos la suerte, con mucho trabajo y el apoyo de todos, de ganar el concurso de iluminación navideña de una conocida marca de bombones. Nuestra intención es no solo mantener lo hecho el año pasado, sino ampliarlo para convertir a La Alberca en un punto de referencia del turismo en esa época de Navidad, que era un momento en que el turismo bajaba bastante y vamos a poder revertir esa tendencia en nuestra villa.

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