Llamada de socorro desde Castellanos de Moriscos ante la aparición de gatos con disparos

La llamada de socorro de la asociación «Castegatos» de Castellanos de Moriscos, al detectar que alguien está disparando con una escopeta de balines a los felinos del municipio ha puesto en alerta no solo a los amantes de los animales, sino que también ha incluido una denuncia ante la Guardia Civil por esta situación.

El último en morir ha sido 'Pompón', un gato joven de unos tres años, que recogieron con lesiones y al pasar por las radiografías del veterinario para saber qué le ocurrió descubrieron que tenía varios balines dentro, además de lesiones por un fuerte golpe.

«Era un gato muy querido y sociable del pueblo. Estaba castrado y ha tenido muy mala suerte. Un vecino lo encontró en mal estado y tras pasar por el veterinario se han detectado los disparos», señala Asun Serra desde la asociación «Castegatos».

El caso de Pompón se añade a los de Lola, que apareció en verano de 2023 con balines en el cuerpo, y también Eva, que sufrió algo similar hace menos de tres meses, con lo que por ahora son tres los gatos que han muerto en similares circunstancias de maltrato.

Dos son los puntos del casco urbano pueblo en los que se concentra este problema, pero con especial intensidad se ha detectado en la zona de la trasera de la parroquia.

«Todos aparecen ahí», indican desde «Castegatos», que trabaja con cuatro colonias de gatos en el casco urbano del municipio con unos cuarenta felinos, a los que se han sumado también otros veinte en el polígono industrial, donde cuentan con dos puntos de atención a los gatos y la colaboración de algunos industriales. «Nos preocupa también que de repente, en una semana, hayan desaparecido cinco gatos de estas colonias del polígono», apuntan desde «Castegatos».

«Hemos denunciado a la Guardia Civil y el Seprona se ha hecho cargo del asunto porque creemos que hay al menos una persona que actúa contra los gatos», puntualizan desde la asociación, que también ha pedido ayuda a los vecinos «para que nos avisen si alguien ve algo con el fin de dar cuenta a la Guardia Civil, algo que se hará con la máxima discreción. Queremos que paren y que se den cuenta de que no se puede maltratar animales, ni envenenarlos, ni dispararles, ni golpearles», concluyen. Los responsables de la asociación denuncian que el origen de todos los gatos del pueblo son «los abandonos».

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