La centenaria salmantina Ubalda Fraile presume del chorizo de su pueblo: «Como este no he comido ninguno»

«Esta fiesta me ha servido de mucha alegría. No esperaba regalos de fuera, ni vestidos ni viajes, pero con vuestra presencia está dicho todo. Me veo muy acompañada de todos los vecinos del pueblo y me alegro muchísimo por todos», expresaba ayer Ubalda Fraile Sánchez, la vecina de más edad de Frades de la Sierra durante la celebración de un homenaje por su 104 cumpleaños (los cumple el 28 de agosto).

La señora Ubalda entraba en el Ayuntamiento viejo de Frades entre aplausos de las decenas de vecinos congregados este miércoles con motivo del homenaje que el Ayuntamiento de la localidad le rindió por sus 104 años. Lo hizo en el contexto de la semana cultural posterior a las fiestas de verano y contó con la presencia de familiares y vecinos, así como autoridades locales, como el alcalde, Francisco Navarro, que le hizo entrega de una placa conmemorativa y unas flores. Antes, los integrantes de la comisión cultural proyectaron un vídeo con una entrevista que le habían realizado a la señora Ubalda unos días antes. En él desgranaba recuerdos de su infancia como la mayor de 9 hermanos, confesando que le hubiera gustado ser maestra, pero no pudo ser porque desde pronto tuvo que ayudar a sacar adelante a sus hermanos. Habló de la Guerra Civil, de cómo han evolucionado los tiempos o del frío que se pasaba en la escuela cuando se apagaba el calor del brasero. Señalaba en la entrevista que ha mejorado mucho la vida de las personas y explicaba cómo la ganadería y los mataderos «han dado mucho al pueblo». Por eso, no dudó en alabar los embutidos que se elaboran en la localidad al indicar: «He comido chorizo de muchos sitios, pero como este ninguno». También dio a conocer su secreto para llegar a los 104 años con tal lucidez: «No he hecho nunca excesos de comer y beber».

Era la mayor de nueve hermanos de los que quedan dos más, de 90 y 85 años. Ha sido madre de dos hijos y tiene un nieto y un biznieto. Siempre ha vivido en Frades, donde formó su familia vinculada a las labores del campo como ama de casa. Allí vive aún con su hijo Juanma y ayer manifestaba su emoción y agradecimiento por haber recibido esa fiesta que llenó el salón del Ayuntamiento viejo de vecinos que no dudaron en cantarle el Cumpleaños feliz para que apagara las velas.

La homenajeada no dudó en lanzar un deseo para todos los presentes con la idea de que puedan llegar a su edad: «Que podáis llegar todos a mi edad con lucidez». Una lucidez que demostró tanto en la entrevista como en vivo cuando, al finalizar el homenaje, no dudó en tomar la palabra para rendir todos los agradecimientos posibles.

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