Fiesta de la Matanza Tradicional La Fuente de San Esteban

La plaza de La Fuente de San Esteban se convirtió en un refugio en un día gélido, en el que los vecinos pudieron entrar en calor junto a la fogata mientras disfrutaban del aroma de los tocinos cocinándose, un buen vaso de vino de dulce caliente y dulces típicos. La IX Fiesta de la Matanza Tradicional del ciclo de la Diputación llegó de la mano de un mercadillo con puestos de alimentación y artesanía, como miel, dulces y artículos de regalo, “un anticipo del I Mercadillo Navideño que vamos a tener”, señaló el alcalde, Francisco José Sánchez Cañamero.

Después de el chamuscado con soplete de un marrano de 170 kilos o, lo que es lo mismo, 15 arrobas, y la exposición de las piezas, todo guiado por el maestro de ceremonias, los 14 voluntarios se dedicaron con afán a cortar la carne y preparar los guisos para elaborar patatas meneás, chichas, hígado y farinato, con el fin de dar un opíparo convite para 350 personas.

“Es algo que está muriendo, y queremos que las nuevas generaciones mantengan vivo el legado”, subrayó el alcalde. Este año el título de matancero mayor y pregonero de la fiesta recayó sobre Martín García Garzón, natural de la localidad, de una familia que emigró a Canarias, y con una posición próspera en el sector cárnico. Después de bailes charros, pregón y una comida popular, el protagonista de esta edición recibió el nombramiento de Hijo Predilecto del pueblo. El afortunado aseguró sentirse encantado: “Esta es, ha sido y será siempre mi profesión”, y añadió que ya es Hijo Adoptivo en la localidad en la que reside. “Creo que esta cultura se está perdiendo en el medio rural, esto es mantener las tradiciones, enseñarlas a los jóvenes; hay que cuidarlas”.

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