Alegre y sabrosa despedida a la Virgen del Rosario en la fiesta de El Tornadizo

El Tornadizo disfrutó este lunes de una alegre jornada de fiesta con la que se cerraban las actividades programadas en honor de Nuestra Señora la Virgen del Rosario. Unas celebraciones que daban comienzo con la misa en la iglesia parroquial de San Gabriel para celebrar después la segunda procesión con la imagen de la Virgen y un nuevo ofertorio en su honor.

Era lunes, festivo en el pueblo y en Salamanca, por lo que quedaban aún hijos del pueblo para disfrutar de las actividades previstas, aunque muchos de los que viven fuera ya habían partido. Aún así, el ofertorio celebrado ayer a la puerta del templo consiguió recaudar 290 euros, que se sumaban a los 828 euros del día grande de la Virgen. Ambas aportaciones se destinarán, según recordaba ayer la alcaldesa de El Tornadizo, Feli Oliva, al proyecto de restauración del Cristo del Humilladero, una talla de madera policromada del siglo XVI que se conserva en la iglesia parroquial.

Acabada la eucaristía y el resto de actos religiosos, la actividad se trasladaba a la carpa adyacente, donde tendría lugar la comida de las fiestas a base de paella, como menú principal, acompañada de embutidos, queso, jamón o empanada y fruta como postre. Los miembros de la peña disfrutaban de una agradable comida en la que no faltó la música del tamboril de Vicente Pérez, la poesía dedicada al pueblo de El Tornadizo por parte de Domingo y, de nuevo, el recuerdo para los ausentes. Concluida la comida, y con los comensales recogiendo mesas y bancos, daba inicio el torneo de cartas para empezar a despedir la programación de las fiestas.

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