Secciones
Destacamos
Mirando los datos publicados en este diario, queda claro que donde nos jugamos las alubias no es en el escenario de la crisis diplomática abierta por Pedro Sánchez con Argentina, sino en las urnas de las elecciones europeas. Del país sudamericano llegan a Salamanca alubias por valor de 129.000 euros, junto a otros 324.000 en miel y 106.000 en carne. Podemos prescindir de ello. La insensatez de Sánchez no pone en peligro nuestro cocido. Nos pone colorados, por el ridículo internacional que supone ver a un presidente de un país hasta hace poco civilizado romper relaciones con otro por un insulto, sin duda inapropiado y descortés, a su santa esposa, pero no nos cambiará la vida.
Esa inaudita decisión de retirar a la embajadora nos retuerce el estómago por muchos motivos: porque el Ejecutivo sanchista no ha adoptado una medida tan radical ni contra la Colombia de ese Maduro dedicado a insultar y vilipendiar a España y sus instituciones ni siquiera contra la Rusia asesina de Putin; porque el primero que insultó fue el ministro bocachancla Óscar Puente llamando drogadicto a Milei; porque la esposa de Sánchez no es una institución del Estado sino una señora investigada por corrupción… en definitiva, porque ya hemos calado al personaje y sabemos de su especialidad en levantar cortinas de humo para convertirse en víctima y llamar a la movilización contra la ultraderecha, a la que culpa de todos los males, incluidas las crisis internacionales provocadas por su errática y ultrabolivariana política exterior. Nos estomaga, pero ahí poco podemos hacer, aparte de asistir atónitos al espectáculo.
Donde nos jugamos el cocido, y además tenemos la sartén por el mango, es en las elecciones europeas. El día 9 de junio podemos darle cumplida respuesta a sus políticas de olvido programado de todo lo que afecta al desarrollo de Salamanca. Con nuestra papeleta podemos demostrarle que no vamos a consentir que su Gobierno siga sin invertir más que migajas en la provincia. Podemos recordarle que tiene abandonada la electrificación de la línea férrea a Fuentes de Oñoro y que no nos vale con la previsión de retomar los trabajos en junio si la medida no viene acompaña de una aceleración de la obra en todos los frentes, después de tantos años de abandono. Con el voto podemos dejarle claro nuestro rechazo a su política de persecución de la tauromaquia, que la fiesta no exige su apoyo pero sí al menos que nos deje en paz. Será la mejor manera de responder a su estrategia de alineamiento con lo peorcito del mundo mundial, para que no llegue el día (puede que haya llegado ya) en que a los españoles nos señalen por ahí como antisemitas, como los mejores amigos de los terroristas islámicos y de los dictadores de la América bolivariana. Será una manera de decirle a Sánchez que nos importa muy poco el honor o el deshonor de su señora, que no es una institución del Estado como pretende hacernos creer y que solo queremos saber si ha utilizado su influencia como esposa del presidente para allegar fondos y conseguir subvenciones para sus patrocinados. Con una papeleta de castigo en las europeas le haremos ver que nos importa Europa, una Europa que apueste por lo agrario y no considere poco menos que delincuentes a los ganaderos como hace su Gobierno. Que queremos en Bruselas parlamentarios que defiendan el campo en contra de quienes pretenden convertirlo en barbecho perpetuo.
Lo de Palestina, Israel, Argentina y demás batallitas de Pedro el Hermoso son fuegos de artificio que no deben despistarnos. Quedan 18 días para votar allí donde nos jugamos las alubias.
Publicidad
Publicidad
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para registrados.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para registrados
¿Ya eres registrado?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.