Faroles y coartadas
Miércoles, 2 de diciembre 2020, 04:00
Tras nueve meses de pandemia sin pisar un hospital, el presidente del Gobierno y el ministro de Sanidad, aprovechando la estancia de la presidenta de ... Madrid en Cataluña, se presentaron de improviso en “La Paz”, sin invitar -o sea, excluyendo expresamente-, al alcalde de la ciudad. ¡Qué sarcasmo aprovechar la paz para hacer una guerra política tan rastrera! Por seguir con las bajezas “sanitarias”, ayer la popular Díaz Ayuso inauguraba el hospital público “Enfermera Isabel Zendal”, y el ministro del ramo pretextó para no asistir “problemas de agenda”. El presidente no dio explicaciones, como tampoco las da por desatender las llamadas del jefe de la oposición durante más de un mes.
Nuestro diputado del PSOE con cara de panolis -aunque no lo es-, Serrada, el niño de la estación, esgrimió ayer en el Congreso otra coartada de tan notorio desprestigio como abusivo empleo, para justificar el porqué de los acercamientos de presos vascos: el “tú más” (Aznar había acercado muchos), como si eso legitimara el oprobioso pacto de Sánchez con Otegui.
Un farol sostenido con aires de coartada es justificar las actuaciones del Gobierno en la pandemia por el asesoramiento de una fantasmal comisión de expertos. Van a tener que inventar la lista porque Transparencia lo exige, y se dice que muchos de los fieles a los que se pide angustiosamente que mientan -que juren que han formado parte de la inexistente comisión-, vistos los resultados letales, se niegan a auto-inculparse como pardillos, a reconocerse notoriamente inhábiles.
Los faroles son para iluminar (véase el rótulo de mis colaboraciones de cada miércoles), y las coartadas para los delincuentes y los adúlteros. Sánchez, sus ministros y portavoces, inventan paridas, es decir estupideces y necedades, en las que el campeón es Ábalos por lo de la delincuente venezolana en Barajas. Dio al menos seis explicaciones diferentes, por supuesto todas falsas. Pero tales paridas, aunque sean indigestas, se las traga el gentío que en las encuestas resulta que volverá a votar PSOE. Tenemos lo que nos merecemos.
Un amigo estuvo excusando presencias incómodas durante años, por padecer colitis. Un día nos enteramos que era estreñido y tomaba regularmente laxantes. Lo repudiamos. Los socialdemócratas verdaderos no tienen cojones para librarse del hipócrita de Pedro Sánchez.
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