¿Qué va a pasar con el Pacto Verde?

La aplicación del Pacto Verde europeo y de todas las normas de carácter medioambiental y de protección de los animales derivadas del mismo fue uno de los motivos fundamentales del levantamiento general de los agricultores y ganaderos de la mayor parte de los Estados miembros de la UE a principios de este año. Pero las normas derivadas de ese Pacto Verde pueden dividirse en dos grandes grupos: en el primero estarían las que ya se han aprobado y se aplican; en el segundo se encuentran las que todavía no se han aprobado y por los tanto no se aplican, estando todavía en una especie de limbo. Y, hecho este análisis, ahora es el momento de las dudas. En el caso del primer grupo ¿se va a dar marcha atrás en esas normas y se derogarán? Y en lo que respecta a las pendientes, ¿se continuará con la tramitación, desafiando así las protestas realizadas por los agricultores y ganaderos?

De momento, estas preguntas no tienen respuesta. Todo va a depender, primero, de la nueva Comisión Europea que se forme. Si esta última decidiese adoptar alguna iniciativa, luego sería el turno del Consejo de Ministros y también del nuevo Parlamento Europeo. ¿Serán sensibles las tres Instituciones más importantes a esas movilizaciones de la mayor parte del sector agrario comunitario? De momento es pronto para saberlo. En el caso del nuevo Colegio de Comisarios, no comenzará a funcionar hasta finales de este año. Por lo que respecta a los nuevos eurodiputados acaban de tomar posesión y ahora están de vacaciones. Ya veremos por donde tiran en el último cuatrimestre de este año. Pero el sector agrario de la UE se llevaría una gran decepción si los representantes que han resultado elegidos por los partidos que dicen defender al campo no intentan cambiar, si no todas, sí algunas de las normas que ya se aplican, a la vez que impiden la aprobación de las que están pendientes.

En lo que respecta a la Comisión Europea, los Estados miembros están enviando estos días sus candidatos a von der Leyen. Esta ha pedido que sean dos, un hombre y una mujer, ya que pretende formar un Colegio de Comisarios paritario. Por España ya se sabe que la candidata es Teresa Ribera, la ministra para la Transición Ecológica, que aspira a ocupar una comisaría importante relacionada con la energía y el cambio climático, así como una vicepresidencia desde la que pretende vigilar la aplicación de ese Pacto Verde por parte de las otras comisarías, incluida la de Agricultura. Visto lo que ha hecho en España durante estos seis años largos que lleva en el Gobierno, no sería una buena noticia para los agricultores y ganaderos europeos que lograse sus pretensiones.

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