El Salamanca UDS no puede con el colista y se aleja del segundo puesto (0-0)

El Salamanca vuelve la senda del fútbol previsible, sin garbo, incapaz de ser superior ante un Numancia B que llegaba colista al Helmántico y con una confusión en las ideas que hacía semanas que no se veían.

No pudo pasar del empate sin goles ante el filial soriano en el Helmántico e incluso en los últimos diez minutos estuvo muy cerca de perder cuando el delantero del Numancia B Javier desperdició un penalti que hubiera hundido todavía más al cuadro salmantino.

El inicio ya hacía presagiar que el Salamanca estaba atontado. Por el sol que coloreaba una tarde maravillosa o por el hecho de que el termómetro daba un respiro al frío y el personal se sentía raro en manga corta. El caso es que el Numancia B del técnico salmantino Pablo Cortés salió sin prejuicios, con descaro y con valentía. Llegaban como colistas, pero les daba igual. En el minuto 20 ya había tenido tres ocasiones claras de gol, en especial una cabalgada del delantero Javier que deja retratado a Pablo de Castro en carrera y su disparo cruzado toca en el palo y se va fuera.

El graderío empezaba a mosquearse con la actuación de los de Jehu Chiapas. En el 21 llegó la primera y única ocasión del Salamanca en la primera parte. Franco pone un buen centro que conecta Diego Benito pero remata fuera. Antes del descanso, el Numancia B seguía defendiendo con orden y llegando con frescura y alegría al área del Salamanca. ¿Dónde estaba el Salamanca del último mes?¿Cómo puede cambiar tanto un equipo en una semana? Se preguntaba el aficionado en la grada, que empezaba a sentir el malestar que hacía un mes que no recorría su cuerpo.

En el segundo tiempo, la narrativa era la misma. El Numancia B en el 54 tuvo un acercamiento muy peligroso que salvó Pablo de Castro mandando a córner. Aparecían los pitos en el Helmántico. La paciencia tiene un límite y en el feudo salmantino todavía más.

A la hora del encuentro, el Salamanca empezó a desperezarse en ataque. Marco Tulio y Amaro lo intentaban desde fuera del área con lanzamientos lejanos. Era el único recurso que tenían ante la muralla numantina.

Jehu Chiapas movía el banquillo. Es curioso cómo mira a la grada a Rafael Dueñas, director general y segundo entrenador, para pedirle consejo y apoyo en la toma de decisiones. Se miran, se hacen gestos. Ellos se entienden. Lo pensara Dueñas o Chiapas, el cambio de Poveda fue un acierto. El futbolista, que venía de marcar el gol salvador ante el Becerril la pasada jornada, salió al campo con la confianza que se le salía de las medias. Comenzó el cuadro salmantino a desequilibrar por el costado izquierdo y a poner en problemas de verdad al filial soriano.

Un centro medido de Poveda en el 80 llega teledirigido a la cabeza de Gabri, que estaba solo en el corazón del área, pero el cabezazo se va fuera por muy poco. Al cuadro soriano le entraba el vértigo y Peli en una incursión en el área no se atreve a remachar. Se acuerdan que hablábamos de la confianza en un futbolista. Toda la que tiene Poveda le faltaba ayer a Peli, que acusó su falta de minutos con decisiones poco acertadas en el tiempo que estuvo sobre el terreno de juego.

En el 81 penalti a favor del Numanvcia B. El punta Javier, que estaba haciendo un partidazo, falló la pena máxima y dejó con vida al Salamanca.

En el correcalles final hubo ocasiones a la desesperada de los dos. Frenazo en el coche de Chiapas.