Avenida logra su octava victoria consecutiva para mantenerse líder antes de la Copa (67-52)

Laura Gil salió decidida a encarrilar el choque desde el inicio y anotó los primeros 8 puntos de su equipo, ganando claramente en cada acción a su compañera en la selección Paula Ginzo. Delaere, que saltó a la cancha con una confianza inusitada, tomó el relevo en la anotación y Avenida terminó dominando el primer cuarto por 18-12, aunque la ventaja pudo haber sido mayor de no ser porque Pendande fue superior a Koné para hacer la mitad de los puntos de las catalanas.

La belga seguía anotando cada vez que lanzaba y atrás las de Nacho Martínez complicaban enormemente la vida a sus rivales. Después de que no quisieran entrar los triples de Carter y Çakir sí que lo hicieron los de Leo Rodríguez y Silvia Domínguez y Avenida iba aumentando la diferencia a su favor hasta doblarla. Así, con una canasta de lado a lado de Leo, que puso el 40-20, terminaba la primera mitad, después de una controvertida decisión de la árbitra principal, dando la bola al Barça a 10 segundos del final cuando el técnico del equipo salmantino había pedido tiempo para preparar el último ataque después de que pareciera claro -y así lo señalaran antes los colegiados- que iba a disponer de la posesión.

Las salmantinas regresaron a la cancha sin la concentración e intensidad que habían mostrado durante los 20 primeros minutos y el Barça CBSlo aprovechó para anotar con facilidad, lo que hasta entonces no había podido, especialmente por medio de Paula Ginzo. No corría peligro la victoria, porque la renta era más que suficiente, pero a Nacho Martínez no le gustaba lo que veía y a los 4 minutos de la reanudación ya había pedido tiempo muerto. En ataque también habían desaparecido las ideas, pero entre un triple de Vilaró y un canastón de Carter daba para que las catalanas no se acercarán más allá de los 16 puntos con los que finalizó el tercer periodo: 51-35.

No cambió ya el decorado, ya que Avenida seguía sin tener el control, le penalizaban las pérdidas, y, aunque ya no iba a tener incidencia en el marcador, sufría nuevas decisiones del trío arbitral que encendían a la grada a pesar de que el encuentro estaba más que resuelto. Ya no iba a volver el excelente nivel atrás de la primera mitad y Ginzo y Pendande siguieron sumando puntos, pero al menos se mejoró adelante, con Vilaró, Koné y Gil como estiletes para que la renta no bajara más sin necesidad de exprimirse ante la exigente próxima semana que va a afrontar el equipo dirigido por Nacho Martínez. La pívot murciana realizó su último servicio forzando una falta a do minutos y medio del final para que se parara el juego y Lucía Rodríguez pudiera entrar en su sustitución. Y, sin más, llegó el final para dar paso a la Copa de la Reina.