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Würzburg levantó el telón del año 2025 con un partido que no pasará a la historia (alguna acción de Iyana Martín puede que sí) pero en el que Avenida logró el triunfo que necesitaba para seguir agarrado al clavo ardiendo de la clasificación para el playin. Ahora mismo, ya sólo con tres choques de esta segunda liguilla por delante, está a una victoria de la cuarta posición que da billete para la siguiente ronda de esta Euroliga.
Antes de sumar el primer triunfo de esta segunda fase de la temporada, el conjunto de Anna Montañana tuvo que masticar mucho el encuentro. Sobre todo en un primer tiempo en el que Avenida no estuvo fino. Cuando Koné le ganó el salto inicial al conjunto checo y Gil anotaba tan fácil en la primera acción ofensiva nada hacia presagiar que al equipo azulón le costaría tantísimo durante los primeros 20 minutos ver canasta. Ese fue el quid de la cuestión. Y Avenida lo supo resolver porque Montañana había insistido hasta la saciedad en esos partidos con puntuaciones tan altas, por encima de los 90 puntos, en que el día que no entraran los triunfos se tenían que basar en la defensa.
Así surcó un complicado segundo periodo, en el que las azulonas tan solo fueron capaces de anotar 14 puntos, casi la mitad de ellos desde la línea de tiros libres. El conjunto azulón se fajó atrás para evitar que el 'farolillo rojo' del grupo se le subiera a las barbas. Fue increíble que con solo 4 puntos anotados en medio cuarto el conjunto checo no se hubiera puesto por delante en el marcador. Algo que lograría después, con Avenida con una pizca más de acierto en ataque. Justo antes de que eso sucediera, Montañana paró el partido por primera vez para recordarle al equipo lo que tenía que hacer. No sirvió de nada pues las checas se adelantaron por segunda vez en el encuentro (27-28). Sin embargo, el tiempo que estuvo ahora por detrás en el marcador fue mínimo, ya que Avenida respondió anotando 5 puntos en un verbo para irse con una renta mínima al descanso (33-32).
El primer cuarto se jugó a oleadas. Las charras llegaron a estar 4 puntos abajo y también 6 arriba y en medio de este toma y daca incierto, los diez primeros minutos se consumieron en el 19-14.
El arranque del tercer cuarto, tras un brevísimo paso por vestuarios, desencalló el encuentro. Gil y Deleare (por partida doble) llevaron al equipo perfumero a tener, hasta ese momento, un colchón de 7 puntos no visto en los 20 minutos anterior; y a partir de ahí, el encuentro se allanó con una técnica un tanto tonta cometida por el técnico visitante que elevó la diferencia hasta los 10 puntos. Entre medias, su equipo estuvo 5 minutos y 44 segundos sin ver canasta. Lo que, sin duda, ayudó. Con el colchón consolidado, Iyana firmó un hact-trick de acciones que levantaron al pabellón de su asiento de un resorte, que fueron dos canastones, pasándose en el segundo de ellos el balón por la espalda, y un tapón antológico. 51-42 un soberbio periodo.
El último cuarto fue un trámite, en el que Brno aligeró mucho su juego y eso le hizo alcanzar su segundo periodo con mayor anotación del choque. Pero Avenida ya había hecho suyo el partido y respondió con esa misma celeridad para mantener las diferencias hasta el 64-58 final.
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