Récord de ataques de lobo con un censo en ascenso y sin control
La Junta tiene cerrado el aumento de indemnizaciones pero ve que no es la solución | Malestar porque el MITECO exija otro recuento pero para vetar controles poblacionales
La preocupación por el aumento de ataques del lobo crece y también por la imposibilidad de realizar controles poblacionales desde que el Ministerio para la Transición Ecológica incluyó el 21 de septiembre de 2021 al lobo en el Listado de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial (LESPRE).
En Castilla y León durante 2022 se ha batido el récord de bajas de ganado, al superar por primera vez las 5.000 cabezas muertas, y en Salamanca se cerró el año con 399 bajas después de 155 ataques registrados. El año anterior hubo 356 reses muertas por ataques de lobos y en 2020, 322.
Ante estas cifras, las comunidades loberas han pedido realizar controles poblaciones del lobo que permitan, como ocurría antes de septiembre de 2021, matar aquellos ejemplares problemáticos con la ganadería. La respuesta del Ministerio para la Transición Ecológica ante esta petición la dio este lunes en Oviedo el secretario de Medio Ambiente, Hugo Morán, quien sorprendió al decir que antes era necesario conocer el censo de lobos.
Ayer, el consejero de Medio Rural de Asturias, Alejandro Calvo (PSOE), se mostró “totalmente en contra” de estas declaraciones y ve ya el ámbito jurídico cómo único camino para resolver esta situación que ve tan complicada. De hecho, y según recogió ayer Efe, ha pedido el apoyo al resto de grupos parlamentarios porque, en su opinión, “hay que reforzar la posición en la Audiencia Nacional, que es donde de verdad se puede ganar este asunto”. Y aludió a la defensa conjunta de su comunidad, Galicia, Cantabria y Castilla y León para que el lobo salga del listado de Especies Silvestres de Protección Especial.
Estas comunidades lo que defienden, según señala José Ángel Arranz, director general de Patrimonio Natural de la Junta de Castilla y León, es que ese censo lo hubiera liderado el Ministerio pero antes de incluir al lobo en el LESPRE. Las comunidades loberas ya tienen avanzado un nuevo censo y la primera fase lo que revela es que existe un “aumento sustancial” de las manadas de la especie con respecto al censo de hace una década.
La Junta ya tiene cerrado el aumento de indemnizaciones a ganaderos que sufran ataques de lobo pero es de la opinión de que en estos incrementos “no está la solución”.