El acusado de calumniar a la juez de Vitigudino se empeña en ser juzgado y desaparece de nuevo

S.R.V., el acusado de calumniar e injuriar a la juez y a un mando de la Guardia Civil en su particular cruzada contra la corrupción en Vitigudino, vuelve a estar en paradero desconocido.

Según informan fuentes del caso a LA GACETA, después de ser archivada la causa que se seguía contra él por su estado de salud mental en el Juzgado de lo Penal número Uno, su abogado recurrió solicitando extrañamente que se celebrara el juicio contra su cliente, ante lo que la Audiencia Provincial respondió que se celebrara la vista y se viera en el interrogatorio si el acusado era capaz de comprender o no. Sin embargo y a pesar de la resolución del alto tribunal, tras haber sido señalado de nuevo el juicio para el próximo lunes, S.R.V. vuelve a estar en paradero desconocido de manera que el juicio ha vuelto a ser suspendido a la espera de su localización.

La Fiscalía de Salamanca solicita una condena de cinco años de prisión y el pago de una multa de 12.960 euros por delitos de calumnias, injurias y atentado a la autoridad para S.R.V., acusado de atribuir la perpetración de diversos delitos a una magistrada y a un sargento primero de la Guardia Civil a través de un blog que él mismo creó en su supuesta lucha contra la corrupción judicial en la comarca de Vitigudino. En el mismo les tildaba a los dos de “prevaricadores” y de “delincuentes” y lanzaba confusas acusaciones contra ambos. Además de las citadas penas de prisión y multa, el fiscal le pide el pago de una indemnización de 1.000 euros para cada uno de los dos perjudicados.

Según recoge el fiscal en su escrito de calificaciones provisionales, con motivo de diversas actuaciones policiales y judiciales, el acusado, un varón de unos 38 años, realizó “de forma deliberada, ofensiva y carente de todo fundamento” una serie de manifestaciones a través de un blog que el mismo creó en internet y que tituló: “Contra la corrupción judicial”. Manifestaciones en las que atribuía a la magistrada del Juzgado de Vitigudino y al sargento primero de la Guardia Civil de la misma localidad la perpetración de diferentes hechos constitutivos de delito, cada uno de ellos en el ejercicio de sus funciones.

En el caso de la juez, además de llamarla “prevaricadora”, se refería a ella con manifestaciones tales como: “Hoy estoy enfadado, aviso a la puerta, estoy hasta los mismísimos de sus delitos constantes, deje ya de delinquir que es una delincuente” o “ante esta situación, le digo a la sociedad, o deshace o me encargaré de que muera gente, literalmente, cuando me obceco con una cosa no paro hasta conseguirla”.

En el caso del mando de la Guardia Civil, al que se refería igualmente como “sargento corrupto”, colgó en su blog expresiones del tipo: “O se deshace, o voy a vivir única y exclusivamente para matar sin vulnerar el más mínimo texto legal” o “esto se liquidará con muerte”.

Pese a que las manifestaciones en su blog puedan parecer en algunos casos carentes de sentido, los informes médicos forenses señalan que el acusado era plenamente consciente de sus actos, de manera que es imputable.

Asimismo, cabe recordar que el Juzgado de Instrucción número Dos de Salamanca condenó a finales de 2021 a S.R.V. por un delito leve de amenazas después de que, a través de un correo electrónico, comunicara al abogado que se le había asignado de oficio que le daría un tiro si no seguía sus órdenes y la línea de defensa que él pretendía.

El juez le impuso una multa de 360 euros y le prohibió comunicarse por cualquier medio o aproximarse al letrado o a su despacho profesional en un radio de 200 metros durante un periodo de seis meses.

Desde el Colegio de Abogados de Salamanca aplaudieron la decisión porque salvaguarda el compromiso con la defensa de la independencia, así como la protección y apoyo a todos los colegiados.

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