Varios clientes hacen cola en una frutería del mercado LAYA

Los productos que ponen en jaque a las familias salmantinas

Carne, pescado, fruta y verdura cuestan hasta un 40 por ciento más que en febrero

Miércoles, 16 de noviembre 2022, 20:30

Llenar la cesta de la compra se ha convertido en un auténtico quebradero de cabeza para cientos de familias salmantinas, que han visto como se han encarecido prácticamente todos los productos básicos.

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El azúcar, los huevos o el pan son tres claros ejemplos de alimentos que se han disparado. En el caso del azúcar, el incremento ha sido enorme, de hasta el 80 por ciento en la última década, siendo estos últimos meses en los que la situación se ha complicado aún más.

El precio tan elevado de la barra de pan, que se ha incrementado hasta 30 céntimos en los últimos seis meses, es consecuencia de la situación energética y del precio de la materia prima. El gas y la electricidad están en máximos históricos y los panaderos han tenido que repercutir ese incremento en el consumidor. Esto se une al coste de la harina, que también está por las nubes con el precio del cereal en la lonja más caro que nunca,

Los huevos es otro de los alimentos básicos que porcentualmente más se ha elevado. La docena supera con creces los dos euros y según indican en el mercado no tiene visos de invertir la tendencia. Desde que se iniciara el año 2022 ha sido uno de los productos que se han convertido en un auténtico artículo de lujo.

La fruta y la verdura han experimentado subidas generalizadas también. El kilo de cebollas que en el mes de febrero valía 1,15 euros ahora cuesta 1,35, o los pimientos rojos que estaban a 3,10 ahora rondan los 4 euros. En cuanto a la fruta, la naranja ha registrado un notable incremento, aunque es cierto que al ser más tardía la temporada de cítricos están llegando al mercado ahora las primeras a un precio de 1,59 euros el kilo y lo lógico es que a lo largo de las próximas semanas sea más económico adquirirlas. El caso opuesto es el plátano, que a pesar de tener un precio muy alto es más bajo que a comienzos de año, en buena medida a que el que llega de Canarias experimentó una gran subida a finales del año pasado por el volcán de La Palma.

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La leche y los derivados de los lácteos también están mucho más caros que el año pasado. El litro, de marca blanca, no se compra por menos de 90 céntimos y el kilo de queso, independientemente de si es de vaca, oveja o cabra, se ha encarecido dos euros de media hasta llegar a los 14.

Los derivados del cereal son otros de los alimentos en clara tendencia alcista. Un kilo de pasta se vende en los supermercados a 1,30 euros, y si es de marca blanca roza el euros. La harina es otro de los productos que se ha disparado.

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Los refrescos también están por las nubes y la lata que hace apenas un año costaba 50 céntimos ahora está en 85.

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