El belén «diferente» que cambió para siempre la vida de un pueblo
La Asociación de Mujeres Damajuanas, de Fuenteguinando, presenta en Salamanca un Belén creado con materiales reciclados, cuya elaboración se ha convertido en un refugio emocional y un apoyo contra la soledad para sus integrantes
Sostenible, artesano y construido a base de emociones compartidas. Así es el belén elaborado por las mujeres de Fuenteguinaldo, que desde ya puede verse en el edificio de la Diputación, en la plaza Colón, y que, más allá de un espectacular montaje de más de 20 metros, es el símbolo de un movimiento que ha cambiado para siempre la vida de un pueblo.
Detrás del belén están las manos —y también el empuje— de las más de 80 integrantes que forman la Asociación de Mujeres Damajuanas, que tres años después de su nacimiento se ha convertido en un referente de creatividad, conexión y comunidad.
Y es que este belén «diferente», como lo describió el diputado de Cultura, es también símbolo de la lucha contra la soledad no deseada, más profunda, si cabe, entre las mujeres mayores que viven en un entorno rural. «Fue Iberdrola la que hace tres años les lanzó el reto de crear un belén sostenible, algo que sabían que no iba a ser fácil, pero que después de año y medio de trabajo superaron con creces», recordó David Mingo.
Todo comenzó con la creación de una primera escena: el mercado, con puestos de frutas, verduras, legumbres y pescado. Después llegaron los diferentes oficios, la granja y, finalmente, el portal. Y todo ello utilizando materiales cercanos y reciclados: granos de arroz, pipas de girasol, botellas, tapones, cajas... con los que han elaborado figuras, carros y todo tipo de estructuras. Incluso los bastoncillos de las pruebas del covid han sido reutilizados para hacer con ellos las patas de las ovejas.
Dar cobijo al alma
Más allá de su valor creativo, el montaje ha tenido un impacto profundo entre las mujeres de Fuenteguinaldo, al convertirse en el refugio emocional y social para muchas. «Más allá de unas figuras y de un Misterio estáis dando cobijo al alma y al espíritu haciendo algo que hace muy poca gente hoy, que es luchar contra la soledad», destacó David Mingo ante Pilar Duque, representante de las Damajuanas, que reconocía lo mucho que disfrutan estando juntas:«Ya sea en nuestra asociación, o sentadas en una mesa camilla al brasero, sabemos que estamos haciendo cosas bonitas por nuestro pueblo y también para combatir la soledad», señaló antes de recordar que también en los pueblos existe la Navidad, «y quien la llena de color y de amor somos sus gentes».
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