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Una experiencia religiosa en Calatrava
Jóvenes de diferentes grupos de la ciudad viven su fe y conocen la realidad de la Iglesia en el Día Diocesano
Paula Daza
Salamanca
Domingo, 26 de noviembre 2023, 10:22
Este sábado tuvo lugar el Día Diocesano de Jóvenes. La Casa de la Iglesia de Salamanca acogió a personas de varios colectivos religiosos de la ciudad, que pudieron compartir el día en comunidad. En palabras del delegado de Pastoral Juvenil de la Diócesis de Salamanca, Andrés González Buenadicha, “con el deseo de ir tejiendo vínculos y hacer Iglesia”.
El tema propuesto este año por el papa Francisco es “Alegres en la Esperanza”, inspirado en una cita de la carta de San Pablo a los romanos.
La mañana, como no podía ser de otro modo, comenzó con una oración conjunta. Durante el resto del día, los jóvenes fueron rotando en grupos más reducidos por los “espacios de esperanza”, donde pudieron conocer las diferentes realidades de la diócesis. En estos espacios, diversos colectivos realizaron actividades y dinámicas con los jóvenes y les explicaron en qué consistía la labor social que llevan a cabo. Las asociaciones invitadas fueron el Teléfono de la Esperanza, que proporciona apoyo emocional ininterrumpido; el proyecto Ranquines de Cáritas orientado a personas con problemas de salud mental y en riesgo de exclusión social; el grupo Fe y Luz, formado por personas con discapacidad intelectuales; la Fundación Mil Caminos, que muestra la visión integral de la ecología, tal y como la concibe el papa Francisco; y el Centro Materno Infantil Ave María, que acoge a mujeres embarazadas y madres con hijos pequeños en riesgo de exclusión social o sin recursos.
Ángel, miembro de la unidad Pastoral del Centro Histórico, señaló la importancia de la unidad en este tipo de encuentros y del apoyo que hay que ofrecer ante cualquier situación de vulnerabilidad. Por su parte Javier, del Grupo Scout Milagro, mostró su alegría porque se haya llamado a la participación de los jóvenes y se hayan podido generar debates en este espacio.
Irene González y Rebeca Sastre, miembros del movimiento Hakuna, señalaron que “los jóvenes están más unidos que nunca a la hora de vivir la fe gracias a todos los movimientos que hay ahora en la Iglesia”, puesto que, para ellos “el objetivo es llegar a Dios, y cada uno escoge un camino diferente para ello”
Por otra parte, Espe y Teresa, pertenecientes a las comunidades de Fe y Luz, expresaron su felicidad por haber podido compartir su realidad con otras personas y agradecieron la posibilidad de conocer otros colectivos.
Sin duda, los jóvenes disfrutaron de la jornada, prueba de ello son las conclusiones que dejaron por escrito tras los talleres de los grupos de esperanza. Algunos de los mensajes declaraban “La fe siempre será un punto de encuentro para la construcción de un hogar”, “la fe es lo último que se pierde pero, ¿dónde se encuentra?” u “¡Ojos cerrados y corazón abierto!”.
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