El Crucero de San Cebrián «resucita» 139 años después
La pieza, del siglo XVI, se ha sometido a una restauración que asegura su futuro «durante muchos años»
El Crucero de San Cebrián estará salvaguardado durante «muchos años» tras la restauración a la que ha sido sometido en los últimos meses por las profesionales Carmen Diego y Carmina Fernández. Se trata de una pieza del siglo XVI, procedente de la desaparecida iglesia del mismo nombre, que se ubicaba en la plaza de Carvajal.
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Hace 139 años fue trasladado al Cementerio San Carlos Borromeo, tiempo durante el cual ha sufrido las inclemencias meteorológicas que provocaron un notable deterioro.
Según las restauradoras, aunque el trabajo de campo concluyó hace dos meses, tras mes y medio de intervención, el proyecto se inició en septiembre del año pasado.
«Tenía numerosas grietas y fendas en distintos puntos del crucero, hecho de piedra arenisca«, ha explicado Carmen Diego. »También presentaba pérdidas de volumen, descomposición y meteorización, lo que hacía que los perfiles de la talla no fueran nítidos«.
El trabajo ha consistido fundamentalmente en conservación, ha insistido Diego, con el objetivo de detener su deterioro y transmitirlo a futuras generaciones. Se han incorporado elementos ajenos a la pieza «solo donde era estrictamente necesario para asegurar su estabilidad y permanencia».
Ha sido un proceso, según las expertas, muy minucioso. Se enfrentaron a una piedra arenisca muy desintegrada. «No podías ni apoyarte en el crucero porque estaba muy inestable», ha señalado Carmina Fernández. La restauradora ha subrayado que el trabajo fue «muy minucioso y lento».
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El alcalde de Salamanca, Carlos García Carbayo, ha presentado el resultado de la restauración este martes por la mañana en el cementerio. Tras años a la intemperie, el regidor ha reconocido que su estado requería una intervención urgente, ejecutada gracias a la colaboración con la empresa gestora del camposanto, Parque Cementerio.
Una colaboración que incluye otras iniciativas, como la apertura del San Carlos Borromeo al público, con visitas guiadas y recorridos con códigos QR.
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