Los seis de Feijóo

Bueno, pues ya estamos en campaña electoral. ¡Quién lo diría! La novedad más importante quizás sea la publicación por parte de diversos medios, no de las tradicionales encuestas con las intenciones de voto y la asignación de los escaños en el Congreso de los Diputados, sino eso de los «trakin», o como se diga.

Se trata de sondeos diarios que dan pistas sobre la evolución del voto: que si Feijóo ha ganado o perdido uno o dos escaños, o que si Sánchez ha hecho lo mismo; otro tanto pasa con Abascal y «superyoyo», que va camino de quedarse en «miniyo».

Lo más interesante de esos sondeos diarios no son tanto las cifras de cada jornada, sino la tendencia que se registra. De momento puede sacarse la conclusión de que el PP va muy delante del PSOE de Sánchez y, además, que los Vox y Sumar se reparten la tercera plaza, unos días para los de Abascal y otros para los de Yolanda Díaz. Para remate de lo anterior, también está claro que el bloque de las derechas podría alcanzar la mayoría absoluta con cierta holgura y superar con claridad al de las izquierdas.

Sin embargo, si se confirma la victoria de la suma del PP y de Vox, a la hora de formar el futuro Gobierno, no será lo mismo que los de Feijóo saquen 160 diputados y los de Vox 20, por poner un ejemplo, que los primeros se queden en 140 y los segundos lleguen a 40. Evidentemente, la situación de partida y las negociaciones no serán las mismas. Esa es una incógnita. Y es que todo apunta a que, en la misma noche de 23 al 24 de junio, en pleno puente de Santiago en Castilla y León y en alguna otra comunidad autónoma, como Galicia, lo único que nos quedará claro es quién no va a estar en La Moncloa. Lo que ya no será tan evidente es el inquilino de ese palacio y, sobre todo, en qué condiciones.

Y, ya que me refiero a Galicia, quiero poner de manifiesto algo que pasa más desapercibido de lo que debiera. Primero, el carácter desconfiado, como buen gallego, de Alberto Núñez Feijóo. Lo segundo, que se trajo hace algo más de un año a una guardia pretoriana de aquella región compuesta por seis, media docena, de colaboradores que tienen completamente rodeado al líder. Hay tres a destacar, Marta Valera, que se ocupa del gabinete; Mar Sánchez, a cargo de los temas de comunicación, y Miguel Tellado, en la organización del partido. Pero si Feijóo forma gobierno llegarán más gallegos, puede que otros seis, para reforzar la guardia pretoriana hasta una docena. Eso no significa que todos ellos vayan a formar parte del Ejecutivo, siempre y cuando, insisto, Feijóo duerma en La Moncloa. En ese caso habrá más gallegos sentados en la mesa del Consejo de Ministros que de otras regiones. Eso es importante, pero lo es todavía más si se tiene en cuenta que serán un poderoso clan, que no se fiarán de nadie de fuera, por mucho carnet del PP que ostente. Nunca como ahora media docena mandaron tanto.