Estados Unidos sanciona a empresas chinas, indias y emiratíes por transportar más de 40 millones de barriles de crudo iraní

El Departamento de Estado de Estados Unidos anunció este jueves una nueva ronda de sanciones dirigidas a una empresa china y a otras tres entidades de gestión naviera por su implicación en la importación y transporte de crudo iraní, en violación de las restricciones impuestas a Teherán. Según el comunicado, las medidas afectan a la empresa Guangsha Zhoushan Energy Group Co. Ltd, con sede en la isla de Huangzeshan (China), acusada de haber recibido al menos 13 millones de barriles de petróleo iraní entre 2021 y 2025.

Además, fueron sancionadas tres compañías navieras –'Marziya', 'Phoenix' y 'Valiant'– por participar en el transporte de más de 40 millones de barriles de petróleo procedente de Irán. Dos de ellas operaron regularmente en rutas ocultas entre 2022 y 2024 desde la isla de Kharg, mientras que la tercera, Valiant, lo hizo desde las islas Kharg, Lavan y Sirri hasta 2025.

Tammy Bruce, portavoz del Departamento de Estado, defendió la medida como parte de la estrategia de «máxima presión» para evitar que Irán adquiera armas nucleares y para contrarrestar su influencia regional. Subrayó que esta red de transporte ilícito permite a Teherán financiar su programa nuclear, apoyar a grupos terroristas y desestabilizar rutas comerciales estratégicas.

El Departamento del Tesoro también sancionó a un empresario indio residente en Emiratos Árabes Unidos, dueño de una flota de casi 30 buques vinculados a la llamada «flota fantasma» iraní. Cuatro compañías asociadas a este operador –ubicadas en Emiratos e India– han sido acusadas de transportar petróleo para la Compañía Nacional de Petróleo de Irán (NIOC) y para el ejército iraní, en operaciones millonarias.

«El régimen iraní se apoya en redes de transportistas y facilitadores sin escrúpulos para mantener a flote su economía petrolera y financiar su agenda desestabilizadora», señaló el secretario del Tesoro, Scott Bessent. Añadió que estas sanciones reflejan el compromiso de EE.UU. por interrumpir cada eslabón del comercio petrolero iraní, especialmente el destinado a Asia.